Si tu empleador te quiere fuera, debe haber evidencia clara de que ya no eres un trabajador productivo. Cynthia Shapiro, exejecutiva de recursos humanos y autora de Corporate Confidential: 50 Secrets Your Company Doesn’t Want You to Know dijo: “Si hubiera alguien a quien ya no queríamos en la empresa, le daríamos las peores asignaciones en días imposibles, plazos, preparamos las cosas para fallar y documentamos eso. Después de unos meses, podríamos despedirlo con seguridad”.
Las fusiones generalmente conducen a algún tipo de despido, incluso si no es una revisión completa. Eres especialmente vulnerable si estás en una posición de personal.
Los cambios en el liderazgo también pueden indicar un cambio en el estado de tu trabajo. Un nuevo jefe puede querer aportar nuevas perspectivas sobre la empresa o las personas con las que ya está familiarizado, y a veces eso significa lo mismo.
Si la gente te dice que mantengas tu actitud bajo control, o si tu jefe dice que no encajas en la cultura de la empresa, es una mala señal. Puede preguntar qué puede hacer para corregir esto, pero lo más probable es que sea demasiado tarde.
Evita esta situación aprovechando todas las oportunidades que puedas para vincularte con tus compañeros de trabajo, fomentar el espíritu de equipo y promover tu empresa.
“Si te pedimos que viajes por tu trabajo o asistas a una conferencia, en realidad no es una pregunta. Di no, y puede ser el final de tu carrera”, dijo Laurie Ruettimann, consultora de recursos humanos y oradora en Raleigh, Carolina del Norte.
Los altos mandos de tu empresa necesitan un registro en papel de los problemas para poder despedirte. Para ellos, una revisión de desempeño es la oportunidad perfecta para documentar el problema.
Múltiples críticas de desempeño negativas son una señal segura de que estás en camino de ser despedido, si se mantiene tanto tiempo. Ponerte en un plan de mejora del rendimiento puede parecer una segunda oportunidad, pero no hay vuelta atrás después de eso.
Un director de recursos humanos de una empresa de servicios financieros dijo: “Si te ponen en un plan de mejora del desempeño, estás cocido. Podría mirarte a los ojos y decirte que haremos todo lo posible para que esto funcione, pero eso es pura tontería”.
Solías disfrutar trabajar con tu jefe. Ahora parece que nada de lo que haces es suficientemente bueno y todo le molesta. Probablemente no será tan amigable contigo.
También observa cómo evalúa tu trabajo. Si te está monitoreando de cerca, es posible que solo esté buscando un desliz que pueda hacer que te corran. Estas son algunas cosas que no debes decirle a tu jefe.
No puede ser más productivo sin la ayuda de tu personal. Cuando cada vez menos personas te informan, tu rendimiento reducido perjudica a la empresa. Dejarte ir se convierte en la única opción.
“Si eres un empleado de alto nivel y te ponen en una tarea especial y te quitan otras responsabilidades para que puedas concentrarte en esa ‘tarea especial’, comienza a arreglar tu currículum, porque estás saliendo por la puerta ”, dijo Suzanne Lucas, ex ejecutiva de recursos humanos en bnet.com.
Cuanto menos trabajo asumas, más fácil será darte el visto bueno.
Si esto es fuera de lo común para tu jefe, él o ella podría pensar que estás perdiendo el tiempo o que tienes gastos inflados. Puede que ni siquiera importe si todo resulta normal, solo más documentación que podría usarse como justificación para despedirte.
Un profesional de recursos humanos en una empresa mediana en Carolina del Norte describió el peor sentimiento del mundo como “ir al baño de damas y ver a nueve personas que conoces que no tendrán trabajo en una semana y tener que actuar normal”.
Si lo que ellos perciben como “normal” te parece extraño, manténte atento.
Los rumores se propagan rápidamente, y si las personas en tu oficina esperan que te despidan, seguramente lo hablarán entre ellos. Es posible que deliberadamente eviten toparse contigo por culpa o por temor a un desliz incómodo.
No estás invitado a las reuniones a las que esperabas asistir. No recibes copias de documentos confidenciales que afectan a tu departamento. No obtienes una respuesta cada vez que le preguntas a alguien qué pasa.
Todos estos podrían ser signos de que tu jefe no confía en ti o está empezando a dudar de tus habilidades. Si menciona la situación y no recibes comentarios reales, tu despido podría ser inminente.
Incluso si te han dicho que es lo mejor para ti, esta es una señal de alerta seria. Tómate este tiempo para consultar las ofertas de trabajo en tu campo y preguntar acerca de las entrevistas.
¿Sientes que de repente tienes más tiempo libre mientras otros en la oficina asumen tareas adicionales? Podría ser porque (probablemente sin saberlo) están compensando el trabajo que pronto dejarás atrás.
Si el trabajo que normalmente se te asigna se lo dan a personal subalterno, es una señal de que ya no eres necesario en la cadena de mando. Te has convertido en el eslabón más débil. Pronto te despedirán.
Tomado de rd.com 14 Secret Signs You Might Be Getting Fired
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