Existen 2 padecimientos que pueden terminar en sordera si comienzas a escuchar un “zumbido” en alguno de tus oídos y no te revisas.
De repente sientes una molestia en el oído, un ligero zumbido que podría volverse más molesto con el paso de los días. ¿Qué puede ser?
El oído es uno de los órganos más sensibles de todo nuestro cuerpo, se encarga de mantener el equilibrio y la audición para recibir los sonidos que nos rodean en conjunto de tres partes fundamentales:
Está formado por el pabellón auricular y el conducto auditivo, los cuales reciben el sonido o lo dirigen al oído medio.
Formado por el tímpano, osteocillos óticos, celdas mastoideas y trompa de Eustaquio.
Transporta los impulsos eléctricos que llegan al cerebro en forma de sonido.
De acuerdo con información de los Manuales de Merck MSD, el oído externo, medio e interno trabajan de manera simultánea para convertir las ondas sonoras en impulsos nerviosos, las cuales viajan hasta el cerebro para ser percibidas como sonidos. (Estas son algunas cosas que tu oído está tratando de decirte).
Sin embargo, cuando la información enviada al cerebro no llega adecuadamente podemos presentar algunas molestias o síntomas como sensación de “zumbido” en los oídos o un ruido similar a un chasquido y que solamente tú puedes escuchar, por ejemplo, tinnitus, un trastorno que de no atenderlo a tiempo podría causar sordera.
Los zumbidos, chasquidos o murmullos se puede presentar tras una infección en las vías respiratorias tras una semana de no mejorar, pero también por exceso de cera en los oídos, lesiones en cuello o cabeza e incluso si padeces hipertensión arterial, describen especialistas del instituto médico Mayo Clinic.
Se trata del crecimiento anormal del hueso esponjoso del oído medio, lo cual impide que los huesitos del oído vibren para captar las ondas sonoras, como consecuencia, se produce una pérdida de audición.
De acuerdo con el National Institute on Deafness and Other Communication Disorders, aunque este padecimiento empeora lentamente, es importante que no pases por alto las siguientes señales de alerta:
Aunque actualmente no existen medicamentos para tratar la otosclerosis, ¡no todo está perdido! Si el padecimiento es leve, se puede tratar con un audífono para amplificar el sonido, sin embargo, muchas veces se requiere de la cirugía, por ejemplo, en la estapedectomía el cirujano inserta una prótesis en el oído medio para restaurar la audición.
Se trata de un trastorno del sistema vestibular del oído interno que puede ser causado por una infección viral o una predisposición genética que afecta a un sólo oído, causando episodios de mareos, vértigo, zumbidos y pérdida de la audición.
Aunque los síntomas pueden desaparecer por periodos, es importante que acudas con tu médico en cuanto notes alguna de estas señales de alerta, ya que al producirse una pérdida de equilibrio, aumenta el riesgo de caídas y accidentes frecuentes.
¿Cómo se trata la enfermedad de ménière? La rehabilitación puede ayudarte a mejorar los problemas de equilibrio, el audífono para el oído ayuda a que puedas escuchar mejor, las inyecciones de gentamicina o esteroides ayudan a controlar los ataques de vértigo.
Acude a tu médico de inmediato en cuanto presentes un zumbido que pueda ser molesto.
Fuente: Bienestar 180
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