Si la lava del volcán llega al mar producirá una peligrosa reacción química
Con el avance de la lava del volcán Cumbre Vieja, en la isla de La Palma, la preocupación ahora es saber qué sucederá cuando alcance el mar, que no se sabe en que momento...
Con el avance de la lava del volcán Cumbre Vieja, en la isla de La Palma, la preocupación ahora es saber qué sucederá cuando alcance el mar, que no se sabe en que momento puede ocurrir, porque a medida que se enfría se va alentando su velocidad.
La razón principal por la que se monitorea de cerca el arribo del magma al océano es por la reacción química que se genera cuando este entra en contacto con el agua salada, y que “puede generar explosiones y emisión de gases nocivos”, según señalan las autoridades del Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca).
Lo que sucede cuando el magma caliente entra en contacto con el agua del mar es un enfriamiento paulatino del fluido caliente, que provoca la emisión de una mezcla de vapor y gases a la superficie, para terminar sedimentando y formando parte de la propia tierra.
El magma, al entrar en contacto con el agua salada provoca una reacción química que aviva un humo intenso que lanza a la atmósfera partículas muy finas de ácido clorhídrico y de vidrio, que pueden llegar a irritar la piel y los ojos o incluso causar problemas respiratorios, poniendo en riesgo todo el hábitat de la zona.
Cuando la lava se enfría rápidamente por el contacto con el agua, “la lava se fractura, y eso puede producir la eyección de proyectiles balísticos a relativamente corta distancia, y la liberación de gases (tóxicos) que la lava tiene atrapados en su interior”, menciona a BBC Mundo Héctor Lamolda Ordóñez, ingeniero geógrafo del Instituto Geográfico Nacional y profesor de la Facultad de Matemáticas de la Universidad Complutense de Madrid.
“Los gases tóxicos liberados en la atmósfera abierta, en un espacio obviamente restringido, acotado y delimitado, no deberían entrañar mayor peligro, ya que no debería haber nadie alrededor cuando eso suceda”, añade Lamolda.
Desde el Ministerio del Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ya han avisado de que, además, la llegada de lava al mar supone un riesgo para la navegación marítima. Así, recomiendan evitar la concentración de embarcaciones en las zonas circundantes a los posibles puntos de llegada de la lava a la costa para observar este fenómeno.