Los omega-3 tienen algunas propiedades antiinflamatorias muy potentes que ayudan a promover la salud gastrointestinal, cardiovascular, neurológica, de las articulaciones y de todo el cuerpo.
Los omega-3 ofrecen increíbles beneficios que se extienden más allá del apoyo a la salud del corazón y el cerebro. ¿Una ventaja inesperada de consumirlo ? Mejorar tu salud intestinal. Ahora entiendo porque las mamás siempre quieren que tomemos aceite de pescado.
Así que un probiótico de alta calidad no es el único suplemento que respalda un intestino sano; las pruebas demuestran que obtener suficientes omega-3 regularmente mediante la dieta y la suplementación refuerza la función intestinal y la salud general para promover una digestión sana, la desintoxicación, la inmunidad y el bienestar mental.
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Estas son tres de las formas más impactantes en que estas grasas únicas promueven la salud intestinal :
Nuestra microbiota intestinal está compuesta por una comunidad diversa y compleja que se ve afectada por una gran cantidad de nutrientes y bioactivos, incluidos los ácidos grasos omega-3.
Resulta que los omega-3 desempeñan un papel en la regulación tanto de la diversidad como de la abundancia de la microbiota intestinal (específicamente, las bacterias beneficiosas ).
De hecho, las concentraciones más altas de omega-3 en la sangre se correlacionan con una mayor abundancia de microbiota en el intestino, y no solo de la dieta.
Hablemos de un elemento importante para la defensa del sistema inmunológico: la mucosidad. La mucosidad desempeña un papel fundamental en la salud intestinal y la inmunidad. Los omega-3 tienen un papel clave en la promoción de la integridad de la mucosidad o mucosa.
Estos ácidos grasos saludables protegen las células intestinales, mantienen el grosor de la mucosa intestinal y aseguran su función de barrera adecuada. Todo esto es vital para el funcionamiento del sistema inmunológico en el intestino.
En un estudio preclínico en animales de 2019 publicado en Food & Function , se descubrió que los omega-3 marinos EPA y DHA , específicamente, ayudan a la función e integridad de la barrera intestinal.
Los omega-3 tienen algunas propiedades antiinflamatorias muy potentes que ayudan a promover la salud gastrointestinal, cardiovascular, neurológica, de las articulaciones y de todo el cuerpo.
Además de modular la producción de compuestos antiinflamatorios, se sabe que los omega-3 modulan respuestas inmunitarias críticas y combaten las vías proinflamatorias en el intestino.
Gracias a sus acciones antiinflamatorias y antioxidantes, los omega-3 también ayudan a combatir el estrés oxidativo en las células inmunitarias e intestinales para ayudar a reforzar las defensas inmunitarias del cuerpo y proteger el intestino.
Los omega-3 realmente llevan el término “grasa saludable” a otro nivel.
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