Desde tacones demasiado altos hasta mala nutrición, la espalda puede comenzar a doler por varias razones. A veces, cuando los discos amortiguadores de las vértebras se hernian o se rompen, su centro similar a un gel puede presionar e irritar los nervios circundantes. ¿El resultado? Es posible que sientas un dolor significativo.
Sin embargo, eso no es una garantía: muchas personas no tienen ningún síntoma, o sus síntomas de hernia de disco podrían estar disfrazados de otra cosa.
Culpa a los rigores de la vida cotidiana. A medida que envejeces, el gel de estos discos comienza a filtrarse y son propensos a sufrir daños. Los siguientes síntomas de hernia de disco podrían ayudarte a identificar la fuente de tu dolor de espalda.
Debido a que el disco puede deslizarse en cualquier parte a lo largo de la columna, el dolor puede afectar otras partes del cuerpo, no solo la espalda.
“Dependiendo de dónde esté la hernia discal, es posible que tengas síntomas en el brazo, el tronco o la pierna”, dice Irene Tien, médica de urgencias en el Hospital Newton-Wellesley en Newton, Massachusetts.
Si bien varios dolores corporales no son los únicos síntomas de hernia de disco, son los más comunes.
¿Crees que te lastimaste la parte superior de la espalda y posiblemente te herniaste un disco? Cuando los nervios están irritados, es posible que los síntomas no se manifiesten como se esperaba.
De hecho, puede presentarse como “ardor, entumecimiento, dolor intenso o una sensación extraña, como frialdad en el tronco del cuerpo, generalmente en un lado”, describe la Dra. Tien. (Conoce cómo prevenir el dolor lumbar).
Los síntomas de la hernia de disco no solo incluyen dolor. Debido a que la hernia discal afecta los nervios de la columna vertebral, puede afectar cualquier número de formas en que el cerebro transmite y percibe los mensajes.
El área donde aparecen los síntomas de la hernia de disco puede proporcionar una pista sobre dónde se encuentra el problema en la columna. Por ejemplo: ¿Tiene problemas para escribir? El entumecimiento de las manos es una señal de que la columna cervical (ubicada en el cuello) es la fuente del problema, dice la Dra. Tien.
“Los nervios que te dan sensación en las manos se originan más arriba en la médula espinal”, agrega. Estos son signos de que tu dolor de espalda podría indicar un gran problema.
Una hernia de disco en la espalda o el cuello también puede tener como objetivo las piernas.
“Los tractos nerviosos que corren dentro de la médula espinal en el cuello continúan hasta las piernas, razón por la cual una compresión severa de la médula espinal puede afectar tus piernas y causar debilidad o desequilibrios”, dice Kaliq Chang, especialista en manejo del dolor intervencionista en el Atlantic Spine Center en West Orange, Nueva Jersey.
Si una hernia de disco en la parte baja de la espalda presiona el nervio ciático, existe el riesgo de desarrollar una afección llamada ciática. Junto con el dolor que puede atravesar la pierna, también puede perder la sensibilidad en los pies o los dedos de los pies, según la Clínica Cleveland.
Se supone que la risa es la mejor medicina, a menos que tu espalda esté involucrada. Toser, reír o estornudar ejerce presión sobre la columna vertebral. Esto puede repercutir en tu espalda, dice Leda Ghannad, profesora asistente de cirugía ortopédica y medicina física y rehabilitación en el Centro Médico de la Universidad Rush en Chicago, Illinois.
La risa dolorosa, la tos y los estornudos son algunos de los síntomas de la hernia de disco que debes tener en cuenta.
Es de esperar que levantar algo pesado te duela muchísimo si tienes una hernia de disco. Pero sentarse a descansar debería estar bien, ¿verdad?
Incorrecto: el dolor al sentarte, o al inclinarte hacia adelante, son síntomas comunes de hernia de disco, dice la Dra. Ghannad.
A pesar del dolor y la incomodidad, la buena noticia que es probable que te cures por tu cuenta. De hecho, 90 de cada 100 personas informan que el dolor de espalda y los síntomas de hernia de disco desaparecen en unas pocas semanas.
¿Una razón? Tu cuerpo puede eliminar el tejido que presiona los nervios por sí solo. Habla con un médico general para ver si los síntomas de tu hernia de disco son lo suficientemente graves como para monitorearlos.
Probablemente no necesites visitar a un cirujano de columna para solucionar tu problema. Un estudio en BMJ Open encontró que después de tres meses, los pacientes con una hernia de disco lumbar que recibieron cirugía o tratamientos “conservadores” como fisioterapia y analgésicos se sintieron igualmente mejor.
La conclusión: la cirugía solo puede ser necesaria si esos tratamientos conservadores no funcionan para ti, o si tu dolor de espalda es tan debilitante que necesitas un alivio rápido.
La mayoría de las veces, una hernia discal no es una emergencia. Sin embargo, en raras ocasiones, la afección puede desencadenar algo llamado síndrome de cauda equina: el disco comprime un grupo de nervios en la parte inferior de la columna y, a menos que te sometas a una cirugía de emergencia, podrías correr el riesgo de sufrir incontinencia.
Llama a un doctor de inmediato si el dolor y la debilidad afectan tu capacidad para funcionar normalmente, si experimentas incontinencia o problemas intestinales, o si tienes entumecimiento en la parte interna de los muslos y la parte posterior de las piernas. Estos síntomas sugerirían que tu disco herniado podría ser más grave de lo habitual.
Incluso si estás seguro de que te lesionaste la espalda, podrías sentir dolor por otra cosa, como una infección renal, un cálculo renal, una úlcera gástrica o reflujo ácido, señala la Dra. Tien.
Si tu dolor de espalda se acompaña de otros síntomas, como ardor en el pecho o dificultad para tragar (como con el reflujo ácido) o náuseas o vómitos (síntomas de cálculos renales), consulta a un médico, ya que estos no son síntomas de hernia de disco y podrían significar algo más serio para ti.
Si bien el envejecimiento te hace más propenso al problema, no significa que sea inevitable. Los hábitos de estilo de vida inteligentes pueden proteger tu espalda, como hacer ejercicio, mantener un peso saludable y usar la técnica de levantamiento adecuada, manteniendo la espalda recta y erguida mientras levanta con las piernas.
La prevención suele ser mucho más fácil que el tratamiento después del hecho, tanto para una hernia de disco como para otros problemas de salud graves.
Encenderlos no solo afecta los pulmones y el corazón. Tu salud espinal es otra razón para dejar el hábito.
Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Emory encontró que fumar puede acelerar el daño a los discos al afectar la función de los vasos sanguíneos que proporcionan nutrientes a esta área.
Es un cambio que puede ayudar a que tu espalda se sienta bien. Además, ten cuidado con estos hábitos cotidianos que están dañando gravemente tu columna vertebral.
Tomado de rd.com 7 Silent Signs of a Herniated Disc You Could Be Ignoring
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