Estos son algunos síntomas a los que debes poner atención:
Fiebre que dure más de 2 semanas sin una causa identificada
Vómito cuya duración sea mayor a una semana sin una causa identificada, o que vaya acompañado de dolor de cabeza que despierte al niño por la noche
Dolor de cabeza que despierte al niño por la noche, que sea de intensidad progresiva, acompañado de cambios en la personalidad y/o síntomas neurológicos
Dolor de huesos y/o muscular que se haya prolongado más de 2 semanas, y que no corresponda a un golpe
Crecimiento de ganglios (cuello, axilas, ingles) que no respondan al tratamiento médico en 7 días, que persistan con un tamaño mayor a 2 cm después de 2 semanas, o que presente crecimiento progresivo
“Bolitas” que se encuentren casualmente en partes blandas o el abdomen, aunque no presenten síntomas
Estreñimiento persistente que no responda a las medidas convencionales es un mes
Tos persistente que dure más de 15 días sin causa aparente