Cómo sobrevivir al Horario de Verano
Cómo sobrevivir al Horario de Verano. Perder una hora de sueño… qué horror. Días más largos y soleados… ¡increíble! Sin importar cómo te sientas, del 70 al 80 por ciento de las personas no...
Sin importar cómo te sientas, del 70 al 80 por ciento de las personas no presentan grandes afectaciones a la salud provocadas el Horario de Verano, de acuerdo con el doctor Shyam Subramian, director del Centro del Sueño en el Centro Médico de Cleveland.
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Para algunos –en especial quienes ya tienen problemas de sueño– la adaptación puede tomar más tiempo. En otros casos, esa aparentemente pequeña hora puede afectar considerablemente el reloj corporal, haciendo que sientan fatiga durante toda la semana o incluso por más tiempo.
Otra sorpresa: un estudio sueco de 2008 reportó un aumento en los ataques cardiacos durante la primera semana después del cambio al Horario de Verano, posiblemente debido a que el cuerpo produce más hormonas del estrés y compuestos inflamatorios.
Investigaciones de la Universidad Stanford y de la Universidad Johns Hopkins detectaron una mayor cantidad de accidentes mortales en el lunes posterior al cambio al Horario de Verano en comparación con el primer lunes posterior a su finalización.
Para sobrevivir a esta transición de la manera más saludable posible, los expertos sugieren estos ajustes graduales.
Acostarte de 15 a 20 minutos antes de tu hora habitual durante algunos días dará a tu cuerpo tiempo de acostumbrarse.
Aprovecha el cambio de horario para corregir tus hábitos de sueño. En lugar de posponer tu alarma, levántate apenas suene y empieza tu día de una vez. Levantarte y exponerte a la luz del sol ordena a tu reloj interno que deje de producir melatonina, la hormona que hace que sientas sueño.
“Si estás manteniendo buenos hábitos de sueño, la adaptación se hará rápido, en pocos días, y pronto todo volverá a ser normal”, dijo al Miami Herald el doctor Sharin Shafazand, profesor de medicina en la Escuela Miller de Medicina en la Universidad de Miami.
Si tienes sueño en estos primeros días, apóyate en el café. Además, muchos estudios indican que es bueno para ti: su consumo está relacionado con un riesgo menor de sufrir diabetes tipo 2, cáncer de próstata, depresión y enfermedad de Alzheimer, entre otros. Para la mayoría de las personas, beber café por la mañana no interfiere con poder dormir por la noche.
No programes muchas actividades para estos primeros días, sugiere WomansDay.com. Hacer mucho sólo aumentará la fatiga que ya sientes. Tener una agenda lo más ligera posible y tratar de reducir el estrés te ayudará a acostarte a la hora de siempre, lo que permitirá que tu cuerpo se ajuste al cambio de horario.
Perder una hora de sueño (y la somnolencia que produce) puede hacer que manejar sea más peligroso, especialmente en los días posteriores al cambio de horario. Las mañanas también suelen ser más oscuras. Y aunque jamás hay que manejar mientras se textea o chatea, es muy importante que evites distracciones en este momento.
En lugar de sentirte mal porque perdiste una hora de sueño y te despertaste mientras todavía estaba oscuro, ¡piensa que un atardecer tardío significa que ya se acerca el verano! Por las tardes, usa esa hora extra de luz para hacer algo saludable por tu mente y tu cuerpo. Sal a caminar con un amigo, o si el clima lo permite, sal al jardín o al patio a leer un buen libro.
Tomado de Reader’s Digest
¿Eres de las personas que siente mucho sueño con el cambio de horario?