Cada una a su manera, estas cinco mamás famosas emprenden acciones que mejoran vidas. Bárbara de Regil Edad: 28 años Hija: Alexa, de 11 años Causa: Rizos de Amor y Alegría A.C. “Mi principal...
Edad: 28 años
Hija: Alexa, de 11 años
Causa: Rizos de Amor y Alegría A.C.
“Mi principal motivación para ayudar a los demás es que soy mamá”, dice la bella y talentosa actriz. “Tengo una hija a la que me gusta ver fuerte y sana. Los demás papás desean lo mismo para sus hijos, y si algunos carecen de recursos para hacerlo y alguien puede ayudarlos, es increíble”.
“La primera vez que hice una labor de ayuda fue en un lugar donde venden pelucas y extensiones para el cabello. Había una maquinita en la que se metían 10 pesos hasta juntar cierta cantidad, creo que 5,000 pesos, y se regalaban esas pelucas a niñas enfermas de cáncer. En vez de meter 10 pesos, yo regalaba pelucas a esas niñas. A esto se dedica Rizos de Amor y Alegría, una asociación a la que he apoyado muchas veces. Hace poco entré a otra que también ayuda a niños enfermos de cáncer que requieren un complemento alimenticio costoso. La asociación compra el producto y se lo da a los papás de esos niños”.
Bárbara está convencida de que hay que predicar con el ejemplo para poder influir en más personas, incluida su hija. “Me llevo súper bien con ella. Es una niña muy deportista; es gimnasta. Platicamos mucho”, dice con orgullo. “Pienso que la mejor forma de crear conciencia en los niños es llevarlos a ver cómo ayuda uno a los demás. Yo llevo a mi hija, pues considero que el ejemplo es primordial. Los niños siempre imitan nuestros actos”.
Bárbara usa las redes sociales para alentar a la gente a hacer algo por los demás, de todas las formas posibles. “La mejor manera es enseñar”, afirma. “Yo subo mis contenidos porque creo que en la vida todo es motivación; te motivas a hacer las cosas viéndolas. Yo trato de motivar a otras personas para que también ayuden”.
Edad: 36 años
Hijo: Thiago, de dos años
Causas: Fundación Nelson and Friends, Children International
Hay personas que parecen haber nacido con espíritu altruista. Una de ellas es esta versátil actriz de cine, teatro y televisión, quien tiene un gran amor por los animales. Desde hace años se dedica a rescatar a cuantos puede, y publica sus logros en las redes sociales a fin de fomentar esta tarea.
“Estoy creando mi propia fundación para tener un registro de los rescates que hago y tratar de apoyar a quien lo necesite”, dice. “Elegí esta causa porque es con la que más me identifico. Uno de mis sueños es abrir un refugio en el que pueda tener animales rescatados, dar servicios y crear conciencia sobre el problema por medio de la educación, que es lo más importante para el desarrollo social”.
El proyecto de Liz se llama Nelson and Friends, por el nombre de su mascota fallecida. “Empecé a hacer esto después del accidente en que nos atropellaron”, cuenta. “Él murió, y yo casi muero. En honor a mi perrito quise meterle más candela a este asunto y hacerlo un poco más formal”.
“Mi fundación se llama Nelson and Friends, pero estoy buscando un nombre que sea más fácil de recordar; tal vez Fundación Animalis. Lo cierto es que la causa es la misma. Lo importante es continuar con esto”.
Desde hace unos años Liz participa en tareas de ayuda a niños vulnerables. “Junto con Eréndira Ibarra soy vocera de Children International, una fundación que se dedica a apoyar a niños de escasos recursos. Trabajamos con ellos haciendo eventos, cineminutos y promocionales. Estamos muy contentas de poder colaborar con una fundación que tiene una causa tan bella”.
”Los niños son el futuro de nuestra sociedad; son lo más importante que tenemos porque es lo que nos hace ser familias. Estos niños necesitan mucho apoyo, y es padrísima la labor que la fundación realiza con ellos”.
Edad: 33 años
Hija: Marisol, de un año
Causas: Kardias A.C.
“Ser mamá es lo mejor que me ha pasado, y que le puede pasar a cualquier mujer”, afirma esta bella y talentosa periodista deportiva. “No deja de sorprenderme todo el tiempo. Me tiene loca y enamorada cada día, y aunque a veces no tengo con quien dejar a la niña y me canso el doble, al final del día vale muchísimo la pena y todo se va compensando”.
Respecto a brindar ayuda a quienes más la necesitan, expresa: “A mí me motiva muchísimo, y disfruto hacerlo porque me da grandes satisfacciones y enseñanzas. Ahora que me ha tocado hacer lo de Kardias, valoro todavía más a mi bebé, pues veo cómo las familias tienen que luchar. A veces uno piensa que su ayuda no sirve mucho, pero es más de lo que uno imagina. Por eso siempre hay que buscar hacer algo por la gente, intentar al menos dejar una huella positiva en alguien”.
“Cuando estuve en Nuestra Belleza México me propuse a hacer cada año alguna obra que pudiera ayudar a la gente, incluso algo tan sencillo como dar cosas que alguien necesite o visitar casas; no se tiene que gastar mucho para poder ayudar. Últimamente me he comprometido a dar más apoyos; por ejemplo, colaborar en varios albergues de niñas maltratadas”.
“El año pasado me pasó algo con un niño que tenía la misma edad de mi bebé y ya estaba desahuciado; yo lo quería ayudar, y me dijeron que mejor buscara otro caso porque ese bebé no iba a pasar del fin de semana. En ese momento me entristecí porque no pude hacer gran cosa. A los dos meses nos buscó la mamá del niño y nos dijo que sí necesitaba la ayuda porque su hijo estaba reaccionando muy bien. Ese niño se salvó; ahora está perfecto y es como un angelito”.
“Esto me dejó mucho como persona, con la grata sensación de que pude hacer algo. Es por eso que estamos también en este medio, para aportar cosas positivas y dejar huella”.
Marisol también nos dio su opinión sobre cómo crear conciencia en la gente —especialmente en los niños— respecto a las causas altruistas.
“Creo que lo principal es que valoren lo que tienen, que den y compartan, pero también que disfruten el acto de ayudar. Si se lleva a la gente por allí, creo que se pueden hacer muchísimas cosas. Y hay que enseñárselo hasta a los bebés, para que crezcan con estos valores: ayudar, cuidar y, sobre todo, disfrutar y valorar lo que poseen”.
Edad: 34 años
Hijo: Ignacio, de dos años
Causas: AMARMEX, Casa Hogar Don Orione, Nutre a un niño A.C., Asociación Mexicana contra la Psoriasis
“Empecé a poner mi granito de arena cuando mi mamá decidió unirse a un grupo de señoras que ayudaban a otras a buscar un lugar donde sus hijos pudieran estar seguros y tranquilos mientras ellas trabajaban”, cuenta la cantante y conductora Angie Taddei. “Esta labor fue creciendo hasta que se hizo una asociación que ahora se llama AMARMEX, y yo comencé a apoyarla en los eventos que organizaba para recaudar fondos”.
“Esos fondos van a varias instituciones. Una de ellas es la casa hogar Don Orione, donde se reciben niños y jóvenes con capacidades diferentes que fueron abandonados por sus familias. Allí realizamos eventos para juntar dinero de donde sea posible”.
“Otra institución a la que me encanta apoyar es Nutre a un niño. Esta asociación empezó hace unos 15 años en la costa de Guerrero, cuando hubo un huracán. Los voluntarios fueron allí a ver las necesidades de la gente, y pasaron meses llevando alimentos y dando estimulación temprana a niños en las escuelas. Hoy trabajan en el Estado de México y enseñan a la gente a hacer huertos urbanos. Así, además de consumir sus propias frutas y verduras, venden parte de lo que cosechan. Yo colaboro allí con un poco de dinero, tiempo y mis redes sociales”.
“La Asociación Mexicana contra la Psoriasis hace unos meses lanzó una campaña en la que tuve oportunidad de participar y difundir su mensaje”.
”Pienso que hay que dar un poco de lo mucho que hemos recibido. Somos muy afortunados por tener techo, comida y ropa. Creo que es fundamental crecer sabiendo eso y que uno tiene algo que ofrecer al universo”.
Edad: 36 años
Hijos: Erik, de dos años, y Lidia, de cinco meses
Causas: Alianza Anticáncer Infantil A.B.P. y Fundación Rebicam
“Hace como 10 años participé en una fundación llamada Alianza Anticáncer Infantil, que está ubicada en Monterrey y ayuda a niños aquejados de cáncer en etapa crítica para que tengan una mejor calidad de vida”, cuenta la exitosa actriz y cantante Lidia Ávila. “Desde entonces, he tratado de seguir en contacto con ellos cada vez que voy a dar conciertos o de visita a esa ciudad”.
“Ahora colaboro con la Fundación Rebicam porque mi esposo, el cirujano plástico Isaac de Hita, y el doctor Javier Solorio hace unos años se propusieron ayudar a mujeres de escasos recursos sometidas a mastectomía a reconstruir sus senos. La reconstrucción mamaria es muy costosa y complicada. Existen muchas fundaciones que dan apoyo a mujeres que padecen cáncer o que se enfocan en prevenirlo, pero hay muy pocas que ayuden a sobrevivientes del cáncer. La misión de Rebicam es hacer que las mujeres se sientan bien física y anímicamente, porque la mayoría de ellas pierde el trabajo, a su esposo o las dos cosas”.
“Yo hago difusión de Rebicam en las redes sociales. Hago saber que es una fundación de cirujanos plásticos que surgió por el simple deseo de ayudar y no tiene ningún interés económico. Lo que pedimos es que los hospitales y las instituciones públicas nos donen el lugar para hacer las operaciones, y los insumos que se necesitan. Hace unos años participé en una campaña que se llevó a cabo en Acapulco. Fui a visitar a las pacientes junto con mi esposo, y fue increíble. La cara de agradecimiento de esas mujeres cuando ven a los médicos no se paga con nada. Llena el alma y el corazón dar algo sin esperar nada a cambio”.
Karla Hernández
