Superpoderes que demuestran la superioridad de perros sobre humanos
El sentido del olfato de los perros es de 10,000 a 100,000 veces más sensible que el de los humanos. ¿Qué tan poderoso es?
No sirve que ocultes tu comida: gracias a su nariz, sabe que la tienes (pero no dejes que coma algo que podría hacerle daño). El sentido del olfato de los perros es de 10,000 a 100,000 veces más sensible que el de los humanos.
¿Qué tan poderoso es? James Walker, exdirector del Instituto de Investigación Sensorial en la Universidad Estatal de Florida, sugiere usar el sentido de la vista como analogía: “si nosotros alcanzamos a ver un objeto que esté a 300 metros de distancia, los perros podrán verlo hasta a casi 2 kilómetros de distancia, y lo harán con nitidez”.
Existen algunos mitos en los que no deberías creer (los rayos sí pueden caer dos veces en el mismo lugar). Pero aquí tienes uno en el que sí puedes hacerlo: los perros perciben si se acerca una tormenta. Los investigadores no tienen una explicación exacta pero han elaborado algunas teorías.
Los perros son sensibles a las bajas en la presión barométrica que acompañan a muchas tormentas, y oyen frecuencias bajas –como los truenos lejanos y los ruidos propios de un terremoto– que los humanos no perciben. No dejes de consultar a tu meteorólogo, pero no ignores los comportamientos extraños de tu mascota: podrían salvarte la vida.
Como si tener una extremidad extra no fuera lo bastante increíble, los perros usan sus colas para comunicarse. Bajan sus rabos cuando se sienten temorosos o nerviosos. Cuando están alertas o emocionados, menean el rabo a una mayor altura. Si están agresivos o se sienten amenazados, sus colas estarán rectas y elevadas.
Además, los perros pueden deducir cómo se sienten los otros canes según la dirección en la que meneen su colita. Investigadores italianos detectaron que los perros se sentían más nerviosos cuando veían que otros movían sus rabos hacia la izquierda (y no a la derecha o no los mantenían fijos). Estudios previos indicaron que mover la cola a la izquierda era resultado de haber vivido una experiencia negativa, como enfrentar a un perro agresivo.
Los perros y los humanos saben cómo cuidarse unos a otros. Seguramente notas cuando algo no está del todo bien con tu mascota, y tu perro sabrá cuando estás enfermo, muchas veces incluso antes de que aparezcan los síntomas. Gracias a su poderoso sentido del olfato, los perros pueden detectar la presencia de compuestos orgánicos volátiles en los cuerpos humanos, lo que incluye a enfermedades como el cáncer.
En 2006, con solo oler el aliento de los pacientes, perros entrenados en la Fundación In Situ fueron capaces de detectar cáncer de pulmón con una exactitud del 97 por ciento y cáncer de mama con una precisión del 88 por ciento. Los resultados fueron mejores que los de muchas biopsias.
Los perros no pueden leer tu mente, pero sí saben cómo te sientes. En un estudio publicado en Biology Letters, los investigadores mostraron fotos de rostros que reflejaban emociones diferentes y sonidos relacionados con una emoción determinada a un grupo de perros. Lo interesante fue que los perros relacionaron la emoción que escuchaban con el rostro correspondiente: si oían una voz enojada, acudían con la cara enfurecida.
Así que tu perro quizá no entienda el reclamo “¡¿Te comiste todo mi cereal?!” tan bien como los humanos, pero por la expresión de tu rostro y de tu voz sí sabrá que no estás de buen humor.
Sí, la empatía es un superpoder. Los perros y cachorros pueden interpretar lo que sientes y empatizar contigo, explica un reporte de Psychology Today. Psicólogos del Goldsmiths College de Londres realizaron el mismo estudio en 18 perros: cada uno observaría mientras su dueño se sentaba frente a un extraño. Los dos individuos tomarían turnos hablando normalmente, harían sonidos en un patrón inusual, y fingirían llorar.
Los psicólogos pensaban que los perros se acercarían a sus dueños mientras lloraban y que tratarían de consolarlos de alguna forma. Pero los perros también consolaron al extraño aunque no tenían ninguna conexión emocional con él, pues habían visto que no se encontraban bien. ¡El mundo sería un mejor lugar si todos fuéramos tan empáticos como los perros!
Seguramente has escuchado historias de perros que lograron regresar a sus hogares a pesar de largas distancias e inacabables obstáculos. De nuevo, su sentido del olfato es parte crucial de su sentido de orientación. Son capaces de seguir sus propios rastros por kilómetros para regresar por donde llegaron y, si el viento les ayuda, hasta pueden localizar el olor de su dueño.
Mientras los humanos solo podemos escuchar sonidos de hasta 20,000 Hz (vibraciones por segundo), los perros pueden escuchar hasta a 60,000 Hz. Las grandes orejas de los perros se encuentran en la parte superior de sus cabezas, la mejor ubicación para escuchar sonidos que los seres humanos no pueden percibir. Además, tienen alrededor de 18 músculos en sus orejas, lo que les permite girar, inclinar y elevarlas para obtener sonidos amplificados.
Por eso los molestan tanto ruidos como los fuegos artificiales y la aspiradora.
Nuestros ojos se acostumbran a la oscuridad entre más tiempo se encuentren en ella (por eso nunca debes encender las luces si escuchas a un ladrón). En cambio, los ojos de los perros automáticamente ven bien en la oscuridad. Sus enormes pupilas dejan que entre más luz, y los bastones de sus retinas funcionan mejor en sus penumbras. Pero su mayor ayuda es el tapetum lucidum, que refleja la luz en la parte posterior del ojo.
Así, pueden ver bien en una oscuridad hasta cinco veces más profunda que aquella que toleran los humanos.
En serio, nunca apuestes que puedes correr más rápido que tu perro. La velocidad promedio de un can es de 30 kilómetros por hora, pero muchos pueden superar los 55 kilómetros por hora en tramos cortos.
La raza más veloz es el galgo, que puede correr a más de 72 kilómetros por hora. En comparación, los humanos más veloces apenas apenas alcanzan los 45 kilómetros por hora.
La simple presencia de un perro puede volverte más saludable. Acariciar a un perro puede reducir el estrés, ayudar a que tu cuerpo libere una hormona para la relajación, y reducir la presión sanguínea (algo que, a su vez, disminuye el riesgo de sufrir una enfermedad cardiaca). Las investigaciones han demostrado que los dueños de mascotas suelen ser más felices o confían más en los otros. Además, sus consultas médicas por molestias pequeñas suelen ser menos frecuentes.
Tomado de rd.com 11 Superpowers All Dogs Have That Prove They’re Cooler Than Humans