Cuando cumples 40 años, has tomado muchas decisiones que te han llevado a donde estás. Como nos dijo Brain Bishop, un hombre recientemente divorciado: “No puedes buscar el amor en una pareja a esta edad sin preguntarte por qué te encuentras en esta situación. ¿Nunca te has casado? ¿Tu matrimonio terminó? Tu respuesta afectará tu punto de vista”.
Por ejemplo, si nunca has estado casado pero anhelas tener hijos, quizá sientas una mayor urgencia que alguien que ya tiene familia.
Y el enfoque de alguien con hijos pequeños será distinto al de una persona que sufre síndrome del nido vacío. “Nos guste o no, son factores que influyen para determinar con quién eres compatible”, dice Bishop.
Quizá has sentido frustración, rechazo y dolor, pero aunque no puedes borrar tu pasado, sí puedes aprender de él.
De hecho, “después de los 40 años puedes aprovechar tus experiencias de vida”, afirma Jodi DeLuca, psicóloga clínica.
No es solo que te conoces bien y sabes qué funciona y qué no en tus relaciones: para este momento quizá ya hayas sentido “la magia del amor”, como dice DeLuca. “Y si ya lo hiciste, puedes y volverás a sentirlo. El cerebro emocional no tiene edad cronológica. Podemos enamorarnos a cualquier edad”.
Cuando eres soltero a los 40 años, las personas reaccionan como si estuvieras violando una ley natural. “La gente se sorprende. Desea saber por qué”, dice Tanya Fruehauf, psicoterapeuta.
“La realidad es que el “deber” de encontrar el amor durante la juventud es una regla arbitraria y pasada de moda. Acepta tu soltería como una elección que has hecho, sin importar tus razones”.
Esto es importante no solo como una actitud interna, sino por lo que proyectas, dice Jennie Lynn, experta en relaciones. “No expreses rechazo por estar solo o soltero. Necesitamos sentirnos cómodos estando solos y amándonos a nosotros mismos; esa energía positiva atraerá a un compañero que sea ideal para ti”.
“Permite que la riqueza de las experiencias que has acumulado te brinde la confianza para atreverte a ir por lo que deseas”, sugiere Margaret Bell, consejera de salud mental.
“Ya has vivido varias décadas, y probablemente luzcas algunas cicatrices. Has reunido historia y experiencia. Has aprendido lecciones y tienes mucho por compartir. Estás listo para dar y recibir y para crear una relación duradera con alguien que comparta tus valores e intereses”.
Una cosa es aprender del pasado a nivel intelectual. Pero otra es quedarse emocionalmente en él, dice Stacy Karyn, consultora en citas en línea.
“Resulta esencial que el pasado quede atrás si quieres encontrar una pareja”, dice, añadiendo que no solo es una cuestión de cómo se sientes, sino también de qué proyectas durante las primeras etapas de la relación.
“Trata de no hablar mucho de tus relaciones pasadas durante las primeras citas”, sugiere.
Una forma de dejar el pasado atrás es recordar que cada persona nueva que conoces es justo eso: una persona nueva.
“Solo porque hayas tenido algunas malas experiencias, no significa que todas las personas que conozcas te llevarán a la misma vivencia desagradable”, dice Kimberly Henshenson, trabajadora social.
No es justo para nadie que le proyectes tus relaciones anteriores, y será mucho más fácil que realmente conozcas a una persona si la ves como un individuo y no como una reencarnación de una historia anterior.
Aceptar tu pasado, reconocer los errores que has cometido, e incluso enfrentar el dolor de haber sido lastimado no es lo mismo que ver al amor con una actitud negativa.
“No dejes que tus experiencias te vuelvan cínico”, sugiere Jonathan Bennett, coach de relaciones. “Es mejor que intentes reconectarte con la energía y la emoción que tenías antes de enfrentar estas experiencias”.
Conectarte con esas sensaciones positivas no significa olvidar las lecciones que has aprendido, señala, sino que te permitas disfrutar el momento con una actitud más optimista.
Cuando tienes una cita mala, dice Hershenson, es fácil caer en pensamientos negativos, especialmente si eres un veterano en citas y relaciones. Pero no lo hagas. Llega a cada cita nueva con una mente abierta.
Una cosa es esperar que encuentres el amor o lo que buscas, pero es mejor no esperar nada, dice Sara Anderson, consejera profesional. “Las expectativas llevan a decepciones”, dice.
En lugar de ello, Anderson sugiere mantener tus esperanzas altas y tus expectativas bajas. Esto ayudará a reducir la presión que hay dentro de ti y en la persona con la que saldrás.
Esto es especialmente verdadero si tiendes a enfocarte en las apariencias. “No des tanta importancia a la imagen”, sugiere Rich Gosse, experto en relaciones. ¡Ya deberías saberlo a los 40! Además, podrías recibir una sorpresa agradable.
Piensa en Charlotte y Harry de Sex and the City: ambos fueron en contra de lo que les gustaba, y fue justo así que encontraron el amor verdadero.
Abre tu mente y deja de guiarte por lo que es “apropiado para tu edad”. Trata de salir con personas más jóvenes o mayores, sugiere Bennett.
Sí, quizá se encuentren en un momento distinto al tuyo, pero eso no significa que no puedan ser compatibles. El que lo seas o no requiere que se conozcan mutuamente, que es el objetivo de una cita.
Cuando tienes 20 años, parece que estás rodeado de solteros, así que tiene sentido considerar a la cercanía como un factor para elegir con quién salir. Pero para cuando tienes 40 años, el número de solteros ha reducido.
No significa que no haya una persona correcta para ti; más bien, significa que podría vivir en otra ciudad. No descartes a alguien solo porque necesitan encontrarse en un punto medio o chatear en lugar de hablar cara a cara.
Existe evidencia científica que sugiere que las relaciones a larga distancia no solo funcionan, sino que son saludables.
“Jugar es una estrategia terrible”, dice Gosse. “En especial el juego de tienes que luchar por conquistarme, porque muchos hombres son tímidos y nunca los conocerás a menos de que te acerques”.
Esto puede ser particularmente cierto con respecto a hombres que no han tenido citas por mucho tiempo.
Así que el hombre con quien sales no es “perfecto” porque no le gustan las películas románticas. ¿Por qué no vas al cine con una amiga?
Si no le gusta el jazz, ve con un compañero de trabajo. Tener buenos amigos es saludable. Para no caer en la trampa de esperar que una sola persona cumpla todas tus necesidades o de rechazar a parejas potenciales porque no cumplen con “toda” tu lista, asegúrate de tener una buena vida social, sugiere Karyn.
En otras palabras, conserva tus amistades con hombres y mujeres.
Es completamente aceptable organizarse con mensajes de texto, así que si insistes en que te llamen por teléfono, estás limitando tus opciones. Y las redes sociales son una buena opción para conocer gente.
De hecho, muchas apps de citas no te permitirán unirte a menos de que tengas una cuenta de Facebook, y otras suelen mostrar a tus partidos potenciales una lista de las personas que podrían “conocer” en común (o más específicamente, a las que ambos están conectados por medio de las redes sociales).
“Si no intentas usar la tecnología actual, te perderás a muchas personas valiosas”, recomienda Bennett.
¿Qué te ha funcionado para poder hacer alguna cita o encontrar pareja?
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