Esta semana, el 24 de mayo de 2022, Uvalde, un pequeño poblado de Texas donde la mayoría de sus habitantes son de origen hispano, se vio sacudido tras un tiroteo en una escuela primaria.
Salvador Ramos era el nombre del joven de 18 años que hace dos días, irrumpió con un tiroteo en la Escuela Primaria Robb de Uvalde. A su paso dejó 21 personas fallecidas, 19 niños y dos maestras. También le disparó a su abuela en la cara, sin embargo, la señora sobrevivió y fue capaz de alertar a la policía.
Por otro lado, el gobernador del estado, Gred Abbott, explicó que la única información que se tenía sobre el tiroteo planeado fue publicada por el mismo atacante mediante Facebook 30 minutos antes de arribar a la escuela primaria.
La primera publicación fue:
“Le voy a disparar a mi abuela”.
La segunda publicación fue:
“Le disparé a mi abuela”.
La tercera publicación, 15 minutos aproximadamente antes de llegar al colegio, fue:
“Voy a disparar en una escuela primaria”.
Ramos arribó a la primaria en una camioneta, la cual estrelló a un costado del edificio. Iba armado con dos fusiles semiautomáticos estilo AR-15. Logró acceder a un salón de cuarto grado, donde la mayoría de los alumnos tenían 10 años y abrió fuego.
Las fuerzas armadas tardaron alrededor de una hora en interceptar a Ramos. Así, Salvador Ramos fue abatido en la escuela por una unidad táctica.
Aún se desconocen los motivos de Salvador Ramos para lleva a cabo esta tragedia.
Irma Garcia y Eva Mireless perdieron la vida en el tiroteo de Texas al tratar de proteger a sus alumnos.
Cuando se trata de masacres masivas, Estados Unidos tiene cifras excepcionales, pues en este país se han registrado más tiroteos que en cualquier otro país del mundo, según un estudio. Entre 1966 y 2012 hubo 90 tiroteos masivos.
En la escuela primaria Sandy Hook en Newtown, Connecticut, seis adultos y veinte niños murieron el 14 de diciembre de 2012.
Adam Lanza, de 20 años, mató a su madre Nancy, de 52 años, y luego condujo en el auto de ella a la escuela, ubicada a unos 8 kilómetros de distancia.
Ingresó y disparó a algunas funcionarias. Luego entró a dos salones y continuó con su masacre.
En uno de ellos se suicidó, poniendo fin a una matanza que duró menos de 11 minutos.
El día de San Valentín de 2018, Nikolas Cruz entró al instituto Marjory Stoneman Douglas en Parkland, Florida, y asesinó a 17 estudiantes y miembros del profesorado e hirió a otros 17.
Activó la alarma de incendios para atraer a la gente al exterior y aumentar la cantidad de víctimas.
Era un exestudiante que había sido expulsado del instituto por razones disciplinarias.
Otro de los tiroteos que ha quedado grabado en la memoria de Estados Unidos es el de la escuela secundaria Columbine en Littleton, Colorado.
Eric Harris, de 18 años, y Dylan Klebold, de 17, matan a 12 compañeros y a un profesor antes de suicidarse en la biblioteca de la escuela.
La pareja había grabado videos caseros antes del ataque en los que hacían referencia a lo que iban a hacer y se disculpaban con sus padres por ello.
El 19 de enero de 2022, en la Academia Oliver Citywide en Pittsburgh, Pensilvania, Marquis Campbell, de 15 años, recibió un disparo en el recinto escolar. Campbell fue trasladado al hospital en estado crítico y murió a causa de la herida. Aún se desconoce quiénes son los sospechosos.
El 29 de enero de 2022 en la escuela secundaria Beloit Memorial en Beloit, Wisconsin, Jion Broomfield, de 19 años, recibió un disparo mortal después de un partido de baloncesto. Amaree Goodall, de 19 años, fue detenida en relación con el tiroteo.
En lo que va del año se han registrado al menos tres incidentes con armas en escuelas en los que hubo víctimas fatales. El 31 de marzo de 2022, en la escuela Tanglewood en Greenville, Carolina del Sur, Jamari Cortez Bonaparte Jackson, un estudiante de 12 años, recibió un disparo mortal. El sospechoso de haber disparado, también de 12 años, fue arrestado y acusado.
Salvador Ramos fue identificado como el hombre armado que irrumpió en la Escuela Primaria Robb el martes con un rifle de asalto y un chaleco táctico, se atrincheró en un salón de clases de niños y abrió fuego. Los agentes que respondieron finalmente entraron a la fuerza en el salón y le dispararon fatalmente.
Era un estudiante de la secundaria local con pocos o ningún amigo que vivía con sus abuelos, y según las autoridades, compró legalmente dos rifles de asalto y decenas de municiones la semana pasada para su cumpleaños número 18.
Un examen de los antecedentes personales de Ramos revela a un solitario adolescente acosado, sin antecedentes penales y, como tantos otros atacantes de tiroteos masivos en Estados Unidos, estaba interesado y tenía acceso a armas de fuego y municiones de alto poder.
Un excompañero de clase del atacante dijo que Ramos “era severamente acosado y se burlaban mucho de él por la ropa que usaba y la situación financiera de su familia. “La gente, en realidad, lo llamaba atacante escolar (school shooter, en inglés) y cosas así”, dijo.
Con información de CNN
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