Todos hemos escuchado que lo recomendable es ingerir al menos dos litros de agua al día; sin embargo, existen estudios —como el realizado por la Universidad de Monash en Australia— que cuestionan si la ingesta de ocho vasos de agua al día (unos dos litros) realmente es saludable.
Para la investigación los científicos analizaron mediante resonancia magnética los procesos que suceden en el cerebro cuando se obliga al cuerpo a beber agua aunque no haya sed.
Dicho estudio reveló que si bebemos agua solo por el hecho de cumplir con una medida ‘saludable’ podemos causar una intoxicación potencialmente peligrosa, pues el cerebro activa un mecanismo conocido como ‘inhibición de ingesta’ para frenar una hiperhidratación.
Cada que tengas sed y eso varía según tus actividades y tu estilo de vida. Tu cuerpo no tendrá la misma necesidad que alguien que se ejercita a diario o de alguien que lleva una vida más sedentaria. Lo más recomendable es hidratarnos cuando nuestro cuerpo lo pida y para ello es indispensable aprender a escucharlo.
El cuerpo es sabio y cuando requiere agua libera una hormona en respuesta a la deshidratación que ocasiona sensación de boca y la garganta secas, lo que indica que requiere un shot de agua casi instantánea.
Ojo, el hecho de que no sea necesario beber dos litros de agua al día no implica que podamos tener la libertad de consumir bebidas como café, refrescos o jugos, siendo estos últimos los menos recomendables para apaciguar la sed debido a sus altos niveles de azúcar.
Aquí están las recetas para tres bebidas sanas y refrescantes que harán de esta necesidad algo más placentero y delicioso:
Además de hidratarte, esta bebida es rica en omega 3; ayuda a la quema de grasa localizada y calma la sensación de hambre.
Esta agua actúa como un poderoso quema grasa y, como aporta hierro, es ideal para los procesos de adelgazamiento que a veces nos dejan sin energía.
A la hora de servir puedes hacerlo con el jugo de medio limón por vaso para darle un sabor más agradable.
La recomendación es consumir entre medio y un litro entero de esta bebida por día durante una semana. Su sabor no es especialmente rico, pero los resultados te van a sorprender. El agua de berenjena regula el colesterol y el tránsito intestinal, elimina toxinas en hígado y tiene propiedades antioxidantes muy poderosas.
Es normal que las primeras veces que consumas estas aguas te sepan muy ácidas, especialmente si estás acostumbrado al azúcar refinada para endulzar, pero puedes utilizar miel o azúcar mascabada en pequeñas cantidades y poco a poco utilizar sustituto o de plano eliminar el endulzante.
Además, te recomendamos que la ingesta de estas bebidas sea al tiempo o frescas, no se recomienda que las bebas muy frías.
Fuente: Cryomx
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