Las manchas de sangre son una pesadilla. Primero, tienes que lidiar con la nariz ensangrentada, la rodilla desollada o cualquier otra cosa que haya causado el problema, y cuando termines, tu recompensa es una mancha antiestética.
¿No estás segura de cómo quitar las manchas de sangre de la ropa, sábanas, colchones, alfombras y más? ¡Estás en el lugar correcto!
Si bien cada elemento requerirá técnicas ligeramente diferentes, puedes usar productos domésticos comunes en todos ellos para combatir incluso las manchas de sangre más rebeldes.
Así es, los elementos de la despensa como el vinagre, la maicena y la sal son solo algunas de las cosas que ya tienes en tu hogar con superpoderes secretos para eliminar las manchas.
Sigue leyendo para descubrir cómo eliminar las manchas de sangre de cualquier tejido de forma rápida y sencilla. Saber esto es esencial y puede ahorrarte tiempo, dinero y dolores de cabeza.
¿El primer paso? ¡Que no cunda el pánico! Tanto si se trata de sangre fresca como de sangre seca, tienes opciones. Pero querrás tener algunas cosas en mente para tener las mejores posibilidades de quitar esa mancha de cualquier tela en la que esté empapada.
Antes de comenzar, memoriza estos consejos. (Por cierto, aquí hay tienes algunos ingredientes secretos que deberías agregar a tu lavadora).
Es más fácil quitar las manchas de sangre fresca que las manchas de sangre seca, así que actúa lo más rápido posible. Lo mismo ocurre cuando necesitas quitar una mancha de mostaza y casi cualquier otro tipo.
El calor fijará la mancha, así que siempre usa agua fría cuando se trata de sangre.
Por ejemplo, si tienes manchas de sangre en una blusa que dice solo limpieza en seco, no la arrojes a la lavadora. Llévala a la tintorería o usa un kit de limpieza en seco para el hogar.
Entonces, ¿qué elementos son los más efectivos en tu batalla contra las manchas de sangre? Todos los que siguen a continuación pueden hacer algo de magia seria; realmente dependes de lo que tengas a mano y de tu preferencia.
Por ejemplo, si prefieres no usar amoníaco, opta por una solución más natural como vinagre o sal. Bonificación: dado que probablemente ya tengas al menos uno de ellos en tu hogar, no tendrás que gastar en soluciones costosas y puedes ponerlas a trabajar de inmediato.
Solo asegúrate de seguir las instrucciones específicas para cada solución que se enumeran a continuación.
Si crees que el vinagre es solo para aderezar ensaladas, piénsalo de nuevo. El vinagre tiene usos domésticos sorprendentes que nunca conociste, incluida la eliminación de manchas de sangre de camisas, jeans, sábanas y colchones.
Para comenzar, cubre el área afectada con vinagre y déjela en remojo durante 10 a 15 minutos. Luego, seca con una toalla, repitiendo hasta que la mancha desaparezca. Si se trata de un colchón o un sofá, seca o enjuague el área con agua fría para eliminar el olor a vinagre.
Si la mancha de sangre está en una toalla, sábana o prenda de vestir, arroja la prenda en la lavadora en el ciclo frío.
No apliques amoníaco directamente a la tela que estás tratando de limpiar. En su lugar, aplica solo unas gotas en una esponja o paño húmedo (humedecido con agua fría). Luego, usa la esponja o el paño para secar el área, cambiando a un lugar limpio cada vez que se seque.
Repite hasta que la mancha desaparezca. Luego seca o enjuaga el área con agua fría para eliminar el fuerte olor a amoníaco. Si el artículo que estás limpiando se puede lavar a máquina, sigue con un centrifugado en el ciclo de frío.
Advertencia: el amoníaco tiene un aroma muy poderoso, por lo que debes abrir una ventana o encender un ventilador cuando lo uses. También crea gases potencialmente mortales llamados cloraminas cuando se combina con lejía, por lo que nunca mezcles esos productos químicos.
El peróxido de hidrógeno es en realidad un blanqueador suave, por lo que resulta útil cuando necesitas eliminar una mancha de sangre (o cuando necesita eliminar una mancha de sudor).
Pero es mejor que la lejía pura porque normalmente no daña el color. Aún así, siempre debes asegurarte de que no decolore la tela en cuestión colocando un pequeño punto en un área oculta.
Una vez que hayas determinado que el peróxido de hidrógeno se puede usar sin arruinar la tela, aplícalo directamente sobre la mancha, usando solo lo suficiente para cubrirlo. Luego, usa una toalla para secar el área.
El peróxido de hidrógeno actúa rápidamente, burbujeando y chisporroteando ligeramente sobre la sangre, por lo que la mancha debe comenzar a disiparse inmediatamente. Para manchas especialmente rebeldes, repite el proceso según sea necesario.
Este es solo uno de los muchos usos increíbles del peróxido de hidrógeno que resultan útiles.
Los accidentes no solo ocurren en casa, por supuesto. Si estás fuera de casa cuando te manchas la ropa de sangre, tome la lata de cola más cercana.
No solo es refrescante y delicioso, sino que el ácido carbónico dentro de esta bebida burbujeante también puede ayudar a disolver las manchas de sangre.
El programa Mythbusters incluso realizó un experimento para demostrarlo. Desafortunadamente, los evaluadores encontraron que, si bien la cola ayudó a eliminar las manchas de sangre de alguna manera, no fue 100 por ciento efectiva.
Por lo tanto, es mejor usar la cola como pretratamiento hasta que llegues a casa y puedas usar uno de los productos para el hogar recomendados en este artículo, idealmente dentro de las 24 horas.
Si necesitas quitar las manchas de sangre de la ropa y tienes una lata de WD-40 en el garaje, tienes suerte.
Aunque es un lubricante que se usa normalmente para proyectos domésticos como aflojar pernos oxidados o lubricar herramientas eléctricas, un poco de WD-40 también te ayudará a eliminar la sangre de la tela.
Solo ten en cuenta que este tratamiento es más efectivo cuando la mancha de sangre está fresca. Simplemente rocía suficiente WD-40 en el área para cubrir la mancha de sangre, déjela reposar durante 5 minutos y luego arroja el artículo a la lavadora con detergente y lávalo como de costumbre.
WD-40 también es una excelente opción si necesitas quitar las manchas de aceite de la ropa.
Mezcla la maicena con suficiente agua fría para formar una pasta espesa. Luego, esparce la pasta sobre la totalidad de la mancha y deja que se seque.
Si se trata de ropa, en lugar de un colchón, puedes acelerar este proceso colocando el artículo cerca de una ventana o en un lugar soleado y cálido. Una vez que la pasta se haya secado, cepíllala.
Si la mancha permanece, repite según sea necesario. Luego, seca la mancha con agua o, si es posible, lava el artículo en la lavadora para asegurarte de que se hayan eliminado todos los residuos de maicena.
Para eliminar las manchas de sangre con talco, sigue los mismos pasos que seguirías con la maicena. Ambos productos funcionan igual de bien, por lo que puedes utilizar el que tengas a mano.
Lo mezclarás con agua fría, formarás una pasta, lo dejarás secar y luego lo cepillarás. Luego, seca el área o coloca el artículo en la lavadora. Voilà, ¡como nuevo!
Este es solo uno de los muchos usos inteligentes de la sal que no implican cocinar, y si deseas usarlo para eliminar las manchas de sangre, debes hacerlo cuando la sangre aún esté húmeda y fresca. Si eso es lo que estás tratando, enjuaga la tela con agua fría.
Si vas a quitar la mancha de sangre de un colchón, puedes secarlo con agua fría. A continuación, combina la sal con agua fría para formar una pasta. Extienda la pasta hasta cubrir la mancha y déjala actuar durante aproximadamente 20 minutos.
La sal tiene una gran capacidad para absorber la humedad, por lo que absorberá la sangre. Cepilla la pasta y repite si la sangre aún es visible. Luego, seca con agua fría o lava a máquina en un ciclo frío para eliminar el exceso de sal.
Como ya mencionamos, es más fácil quitar una mancha de sangre si la cuidas temprano, antes de que tenga la oportunidad de fraguar. Sin embargo, la vida pasa y, a veces, puede que eso no sea posible.
Para combatir las manchas de sangre seca, probablemente necesitarás un poco de fuerza muscular además de un detergente para ropa de alta resistencia.
Para este proceso, llena un fregadero con agua fría y agregue una cucharadita de detergente para ropa o quitamanchas por cada litro de agua. Si tienes un producto a mano que descompone las enzimas, esto funcionará mejor.
Déjalo en remojo durante aproximadamente 4 horas. Luego, sacude el exceso de agua de la tela y aplica más detergente a la superficie de la mancha si aún está disponible. Frota la mancha o usa un cepillo para restregarla.
Lava como de costumbre en la lavadora con lejía que no deje color. Si la mancha persiste, repite el proceso y agrega una cucharadita de amoníaco al fregadero mientras la tela se remoja.
Tomado de rd.com How to Remove Blood Stains
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