Si alguna vez te has golpeado el dedo del pie caminando en la oscuridad, entonces entiendes que para algo tan pequeño, un dedo del pie puede causar verdadera agonía. Tus dedos de los pies pueden ser pequeños, pero desempeñan un papel importante en tu cuerpo, lo que representa un tercio de la estabilidad de tu pie.
“Piensa en tu pie como un taburete de tres patas, apoyado por el talón, el dedo gordo y los dedos restantes”, dice Kenneth Jung, cirujano ortopédico de pie y tobillo en el Cedars-Sinai Kerlan-Jobe Institute en Los Ángeles.
“Un problema en cualquiera de estos afectará a los demás y a tu pie en su conjunto”.
Tus dedos de los pies están compuestos de hueso, músculo, tendón, nervios y arterias, y el dolor puede ser el resultado de una enfermedad o lesión en cualquiera de ellos, dice Sophia Solomon, podólogo y cirujano de pies en Manhattan.
Los problemas que comienzan siendo pequeños pueden convertirse en problemas más grandes que afectan a más tejidos e incluso pueden causar deformidades duraderas que requieren cirugía u otros tratamientos invasivos.
Si no se trata, el dolor puede perjudicar tu movilidad, inhibiendo tu capacidad para hacer ejercicio, trabajar, hacer tus pasatiempos y vivir tu vida. Los problemas de los dedos de los pies también pueden convertirse en una fuente de dolor crónico, lo que lleva a problemas que alteran la vida como el insomnio y la depresión.
“Una vez que tengas dolor en los pies, cuanto antes lo trates, mejor estarás”, dice el Dr. Salomón. “Esto puede llegar a ser debilitante, no es algo que quieras ignorar”.
El dolor de los dedos de los pies puede sucederle a cualquier persona en cualquier momento, como puede atestiguar cualquiera que haya pisado un Lego, pero hay cosas que aumentan tu riesgo, dice el Dr. Jung.
Conocer tus factores de riesgo personales puede ayudarte a prevenir y mitigar el dolor, las enfermedades y las lesiones.
Gran parte de tu propensión a ciertos tipos de dolor en los dedos del pie se puede atribuir a tus padres.
Tus genes no solo dictan la forma y el tamaño de los dedos de los pies, sino que también pueden determinar las cosas que indirectamente causan dolor en los dedos de los pies, como los pies planos o un mayor riesgo de artritis inflamatoria.
Los pies de cada persona son únicos. Incluso ligeras diferencias en los ángulos de las articulaciones, la laxitud de los tendones, la opresión de la piel, la colocación de los nervios y las estructuras de los huesos pueden cambiar el riesgo de dolor en los dedos de los pies, dice el Dr. Jung.
El mundo en el que vives puede tener un gran precio en tus pies. Los trabajos que requieren que estés de pie durante largos períodos de tiempo o practicar un deporte que requiera un impacto en tus pies, como el fútbol, pueden aumentar tus posibilidades de tener dolor en los pies y los dedos, dice el Dr. Jung.
Tu salud general, incluidos los hábitos de ejercicio y nutrición, también puede desempeñar un papel, dice el Dr. Jung.
Tener sobrepeso u obesidad puede causar problemas en los pies. Ciertas dietas, como las que contienen alimentos inflamatorios o una sustancia química llamada purina, pueden exacerbar los problemas de los dedos provocados por la artritis, como la gota.
Los alimentos ricos en purinas incluyen carnes de órganos (hígado), carne roja, alcohol y alimentos endulzados con azúcar. El ácido úrico (así puedes saber si tus niveles están altos) se forma cuando el cuerpo descompone la purina. Con la gota, los altos niveles de ácido úrico en la sangre pueden hacer que se formen cristales alrededor de una articulación.
Otros factores del estilo de vida, como tu elección de zapatos (más sobre eso a continuación), tus aficiones (como correr) y el tipo de suelo en tu hogar también pueden desempeñar un papel en el dolor de los dedos del pie. Usar tacones altos o zapatos de punta también puede aumentar el riesgo.
Es un hecho triste de envejecer, pero a medida que envejeces, tus pies, junto con el resto de los huesos y articulaciones de tu cuerpo, se vuelven más propensos al uso excesivo, las enfermedades y las lesiones, dice el Dr. Salomón.
Las mujeres son más propensas a ciertos tipos de dolor en los pies. Esto se debe en parte a efectos biológicos, como las hormonas. Por ejemplo, la hormona relaxina relaja las articulaciones y la disminución de los niveles de estrógeno durante la menopausia puede reducir la densidad ósea, lo que puede aumentar el dolor en los dedos de los pies.
Las mujeres también pueden ser más propensas a algunos tipos de artritis inflamatoria, aunque los hombres tienen un mayor riesgo de gota, un tipo de artritis. Se sabe que la gota causa un fuerte dolor en los dedos del pie, y a menudo el dolor y la hinchazón en un dedo gordo del pie es uno de los primeros síntomas.
Los hombres también tienen un mayor riesgo que las mujeres con diabetes tipo 2, que puede afectar a los pies. Y tienden a tener una aparición más temprana de neuropatía diabética, que es un daño a los nervios que puede causar entumecimiento, hormigueo y dolor en los pies.
Muchas enfermedades, como la artritis, la diabetes, la esclerosis múltiple y la osteoporosis, pueden ocasionar dolor en los dedos de los pies como síntoma o pueden aumentar el riesgo de dolor.
Los dedos hinchados y rojos también pueden ser un signo de covid-19.
Antes de tratar el dolor de los dedos del pie, debes hacerte una idea de lo que podría estar causándolo. Tratar el dolor sin abordar la preocupación subyacente no ayudará y puede causar más daño a largo plazo, dice el Dr. Jung.
Estas son las causas más comunes de dolor o disfunción en los dedos de los pies:
Un juanete parece un bulto doloroso en la articulación base del dedo gordo del pie. Sin embargo, lo que estás viendo no es un crecimiento, sino un hueso que se dobla hacia fuera y hacia los lados con el tiempo, dice el Dr. Jung.
Algunos juanetes pueden ser indoloros pero molestos, ya que pueden hacer que los zapatos se ajusten peor. Otros pueden variar desde un dolor moderado hasta una discapacidad grave, donde cualquier presión en el dedo gordo del pie es agonizante.
Muchas personas con juanetes tienen una predisposición genética para ellos, pero hacer cosas que ejercen mucha presión sobre la articulación del dedo gordo del pie, como usar tacones altos durante largos períodos de tiempo, puede empeorarlos.
Esta es una deformidad física de los dedos de los pies, generalmente los tres dedos medios, donde se curvan hacia abajo en la articulación media.
Los dedos de martillo son causados por un desequilibrio de tejidos blandos en el que el tejido se vuelve demasiado apretado en la parte inferior y se estira en la parte superior, dice el Dr. Jung. La genética y el uso de zapatos demasiado ajustados son los culpables comunes.
Cualquier crecimiento benigno puede causar dolor leve a intenso en los pies y en sus dedos, dice el Dr. Salomón. Las verrugas plantares y los callos son los más comunes.
Puede parecer molesto, como caminar con una piedra en el zapato, o puede ser tan doloroso que un médico deba eliminar el crecimiento.
Las verrugas plantares son causadas por un virus, los callos son causados por una presión prolongada y el frotar o rozar.
Los músculos débiles de las piernas y los pies, combinados con problemas de mala postura y anatomía, pueden perjudicar la forma en que caminas, lo que provoca dolor y problemas estructurales con el tiempo, dice el Dr. Jung.
La pronación y la supinación, donde los pies ruedan demasiado hacia adentro o hacia afuera, respectivamente, son manifestaciones comunes de estos desequilibrios y pueden causar dolor en los dedos de los pies.
Debido a que afecta a las articulaciones, todos los tipos de artritis, incluida la osteoartritis, la inflamación (como la reumatoide y la psoriasis) y la gota, pueden causar dolor, hinchazón y deformidad en los dedos de los pies, dice el Dr. Salomón.
Si bien estas condiciones pueden ser dolorosas por sí solas, también aumentan el riesgo de dolor en los dedos al cambiar la forma de caminar y hacer que sea más difícil encontrar zapatos que se ajusten correctamente, añade.
La artritis es más común en el dedo gordo del pie porque esa es la articulación que hace la mayor parte del trabajo.
Meter los pies en zapatos demasiado pequeños puede provocar una gran cantidad de problemas en los pies y especialmente en los dedos, dice el Dr. Salomón.
Una punta estrecha puede causar uñas encarnadas dolorosas y empeorar los juanetes, mientras que los zapatos estrechos pueden cambiar la forma en que caminas, lo que conduce a la inestabilidad y el dolor de los pies y los tobillos. Los tacones altos pueden causar o empeorar los juanetes y los dedos de martillo.
Los nervios que van a los dedos de los pies pueden dejar cicatrices o espesarse con el tiempo, especialmente si se lesionan o se ven afectados en el mismo lugar repetidamente.
Por ejemplo, usar zapatos de fútbol apretados mientras pateas la pelota repetidamente con el mismo punto en la parte interna del pie. Esto conduce a dolor, ardor y entumecimiento en el punto focal donde se comprime el nervio, dice el Dr. Jung.
Los crecimientos óseos pueden ocurrir en los dedos de los pies, como resultado de lesiones, genética o sin ninguna razón. Estos pueden ser indoloros, pero a menudo a medida que se hacen más grandes pueden causar mucho dolor en los dedos de los pies.
Los huesos pequeños de los dedos y los pies son relativamente frágiles y tienen que soportar mucho impacto todos los días, lo que los hace más propensos tanto a fracturas por estrés como a fracturas regulares, según el Dr. Salomón.
Estos pueden ser difíciles de detectar y muchas personas pasarán días o semanas sin siquiera darse cuenta de que se rompieron un hueso del pie, dice.
Tomado de rd.com 10 Reasons Why You Might Have Toe Pain
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