Para ser sinceros, todos, o al menos la mayoría de las personas, hemos sido controladores al menos alguna vez; y es que, ¿a quién no le gusta que las cosas se hagan a su gusto y a su manera?
Si bien puede haber algunas situaciones en las que tener control es necesario, cuando se trata de relaciones interpersonales, la necesidad de controlar puede ser muy perjudicial. La verdad es que cada persona es un individuo y tiene su propia forma de pensar y actuar, y tratar de controlar a los demás puede generar resentimiento y frustración.
Por esta razón, asumir regularmente una postura controladora puede causar problemas y conflictos en las relaciones. Cuando una de las partes insiste en hacer siempre las cosas a su manera, resulta algo agotador para todos.
Si sientes que tu necesidad de control está saboteando tus relaciones, es importante que empieces a trabajar en ello. Una buena manera de comenzar es practicar la confianza y la aceptación. Intenta dejar ir el control en situaciones que no son críticas y aprende a confiar en las decisiones y acciones de los demás. También es útil identificar las situaciones que te hacen sentir más necesidad de controlar y trabajar en formas alternativas de manejarlas. Te puede interesar leer: Por qué controlar tu enojo puede ayudarte a vivir más tiempo
Si no se detiene, la necesidad de controlarlo todo puede causar los siguientes problemas en las relaciones:
Falta de reciprocidad
Cuando sólo te enfocas en tus propios deseos y necesidades, les comunicas claramente a los demás que los suyos no importan; les envías el mensaje de que lo que tú quieres es más importante que lo que ellos quieren. Por ello, debes dar espacio para que tus seres queridos comuniquen sus deseos y hagan un esfuerzo por escuchar sus pensamientos y sentimientos genuinamente.
Sensación de molestia y frustración
Cuando tomas el control, no necesariamente es con una mala intención, de hecho, muchas veces es todo lo contrario y detrás suele haber buenas intenciones. Pero al asumir lo que los otros quieren o lo que es mejor para ellos, cometes el error de hacer cosas que, por muy bienintencionadas que sean, no son de su agrado. Entonces te molestas si no reconocen tu esfuerzo, y más aún si te lo recriminan. Por eso, lo mejor es evitar suponer y hacer las cosas sin consultar, y mejor dialogar y poner claro lo que cada uno desea.
Falta de equilibrio
Cuando actúas de manera tan autocrática, los desequilibrios en la forma en que te relacionas a menudo se imponen. Si tu pareja nota que siempre te aferras a hacer las cosas que quieres y del modo que las quieres, aunque no esté de acuerdo, es posible que surjan conflictos, o que prefiera darte por tu lado para evitar discusiones, pero con el tiempo, se alejará y terminará por hartarse. Esa falta de equilibrio y equitatividad causa insatisfacción y resentimiento.
Sentido de uno mismo dañado
Las relaciones controladoras son relaciones tóxicas para todos los involucrados. La persona que es controlada puede verse a sí misma como inadecuada, al creer que es incapaz de hacer mucho y al no ser considerada, escuchada ni respetada en la toma de decisiones. Por otro lado, la persona controladora, puede llegar a sentirse mal consigo misma al darse cuenta de su egoísmo y autoridad. Cuando sus seres queridos se distancian debido a su constante necesidad de control, se pueden sentir rechazados e inseguros. Por eso, hay que hacer todo lo posible por cambiar el control por colaboración.
Conclusión
Es claro que la necesidad de tener siempre el control y de no tomar en cuenta las necesidades, sentimientos y pensamientos de la otra persona involucrada puede arruinar las relaciones en todos los ámbitos y niveles, pero más aun cuando se trata de relaciones de pareja, debido al apego que se genera y a la convivencia más frecuente y cercana.
En última instancia, saber cuándo dejar ir el control puede hacer que tus relaciones sean más saludables y significativas. Así que, si sientes que tu necesidad de control está saboteando tus relaciones, es hora de empezar a trabajar en ello para que puedas construir relaciones más fuertes y satisfactorias.
Con información de Is Your Need For Control Sabotaging Your Relationship? A Counselor Explains