Los frijoles en México son un producto estratégico, pues representan toda una tradición productiva y de consumo y cumple con diversas funciones tanto de carácter alimentario como para el desarrollo socioeconómico.
A lo largo de la historia se ha convertido no sólo en un alimento tradicional, sino también en un elemento de identificación cultural comparable con el maíz y el chile, que son básicos para la dieta alimentaria mexicana.
Actualmente su consumo se enfrenta a modificaciones importantes ante una sociedad cambiante, incluidos los hábitos alimenticios, a consecuencia del urbanismo, la migración y el empleo. Uno de esos cambios obedece a los hábitos modernos, los cuales dejan poco tiempo para la elaboración de ciertos platillos.
Por eso es cada vez más común que la gente ponga en su mesa frijoles cocidos no en casa en la olla exprés o en la de barro, sino los que vienen en bolsa previamente cocidos y preparados.
Los frijoles en bolsa son una solución rápida cuando queremos acompañar nuestros platillos con estas leguminosas, pero según un estudio realizado por la asociación El poder del consumidor, tal vez no sea una opción muy saludable.
El estudio entre diversas marcas de frijoles cocidos en bolsa halló que la mayoría de ellos tiene altas tasas de sodio, así como la presencia del glutamato monosódico, un aditivo que inhibe los centros de saciedad y que en altas cantidades está relacionado con el estrés oxidativo, déficit locomotor y de aprendizaje, así como obesidad y disfunción renal.
Los frijoles en bolsa tienen como ingredientes
La mayoría de las marcas analizadas contienen una gran cantidad de sodio; de hecho una bolsa de 430 gramos contiene el 94 por ciento del sodio total diario recomendado para un adulto que es de 2,000 mg, según la Organización Mundial de la Salud.
Existe parte de la población (como estudiantes o trabajadores) que fácilmente podrían consumir una bolsa completa en un día dividida en dos porciones (desayuno y comida, por ejemplo). Y el etiquetado no ayuda a vislumbrar que al ingerirlo en un solo día se estaría consumiendo casi el total del sodio recomendado.
El alto consumo de sodio está asociado a la mala calidad de la dieta y a problemas de salud como la hipertensión. Además, genera toxicidad celular, lo que afecta el crecimiento celular, cromosomas y puede llevar al desarrollo de cáncer.
Hay que resaltar que la cantidad de sodio que contiene el frijol cocido en su forma natural es baja, lo que indica que la mayoría del sodio de este producto es añadido, proveniente de sal yodada.
Por otra parte, la disminución en el consumo de alimentos preenvasados contribuye en gran media a la disminución de la ingesta de sodio y mejora el control de la presión arterial.
Aunque la congelación no elimina los microorganismos, sí detiene su proliferación, preservando así las propiedades…
El cáncer de estómago comienza con un crecimiento descontrolado de células en el tejido gástrico,…
Un equipo de investigadores ha hecho un avance significativo en la biología humana creando un…
El salmón, ese pescado de carne rosada y sabor suave, es mucho más que un…
¿Quieres sentirte más joven y lleno de energía? El calostro bovino puede ser la clave.
Tres expertos veterinarios nos ofrecen algunos consejos para acampar con perros, desde cómo prepararte y…
Esta web usa cookies.