Una niña escribió una nota de agradecimiento a su cartero
Una niña de 11 años agradeció a través de nota a su cartero y recibió cientos de respuestas de muchos empleados agradecidos en todo el país.
Muchos estadounidenses se han sentido aislados y con miedo este año, y la familia Weber de Sioux Falls, South Dakota, no es distinta. Pero Emerson Weber de 11 años tenía un hobby que se convirtió en un antídoto importante. Escribe cartas—muchas cartas. Un día la primavera pasada, incluso escribió una carta a su cartero.
“Quería agradecerte por tomar mis cartas y entregarlas”, dijo. “Eres muy importante para mí”. En poco tiempo, el simple agradecimiento de Em se compartió por el servicio de correos de Estados Unidos. Muchos de los trabajadores que leyeron su nota de agradecimiento le escribieron una de vuelta.
Su padre, Hugh Weber, un director en una compañía de diseño, se conmovió tanto por la respuesta de su cartero que la publicó en Twitter en mayo, a mitad de la cuarentena, para compartir su aprecio por la cantidad de amor y la maravillosa niña en medio de todo.
Emerson, mi hija de 11 años, está en un viaje alocado con correos y con nuestro cartero local, Doug. Y creo que hay un mensaje más profundo en todo esto. Primero, la historia de fondo. Em tiene un gran hábito de escribir cartas. Mantiene correspondencia activa con más de una docena de sus personas favoritas. Y si has sido uno de los afortunados que reciben una de las cartas y sobres decorados a mano, entonces tienes una gran idea de la alegría que incluyen.
Es probable que una carta de Emerson incluya algo de arte, una broma o dos, una mención de su hermano menor, confesiones de su amor por Taylor Swift y suficientes preguntas para garantizar una respuesta. Entonces, cuando decidió agradecer a nuestro cartero por el servicio que nos brinda, no dejó nada. Entró Taylor Swift, entró el hermano pequeño, entraron los chistes: ¿Por qué nunca ves elefantes escondidos en los árboles? Porque son realmente buenos en eso.
Doug el cartero nunca había conocido a Em antes de que las cajas de cartas llegaran. Em escribió, “Soy Emerson. Podrías conocerme como la persona que vive aquí, que escribe muchas cartas y decora los sobres. Bueno, quería agradecerte por tomar mis cartas y entregarlas. Eres muy importante para mí. Hago feliz a las personas con mis cartas, pero tú también lo haces”. Continuó, “la razón por la cual eres muy importante en mi vida es porque no tengo teléfono, así que ¿cómo se supone que me mantenga contacto con mis amigos? ¡Tú haces que sea posible!”. Lo puso en la caja y sonrió cuando se lo llevó, y eso fue suficiente.
El siguiente día, llegó un paquete con algunos sellos y dos cartas. Doug había compartido la carta de Em con su supervisora, Sara, y ambos querían compartir lo emocionados que estaban. Sara dijo que como un trabajador esencial, Doug podría no ser capaz de mantener correspondencia regular, pero ella si podía. Em empezó a escribir esa misma tarde.
La siguiente semana, recibimos una carta de “Señor y Señora Weber.” Parece que Sara había compartido la nota de Em como un “montón de gracias” en el boletín interno de correos para el oeste de Estados Unidos, y había muchos que querían agradecerle.
Hoy, vimos a Doug saliendo del camión con dos cajas de cartas de todo el país. Tomamos una foto rápidamente a través de la puerta cuando el y Emerson se conocieron por primera vez. Fue un hermoso momento de reciprocidad en silencio.
Estas cartas son tan profundamente humanas. Están llenas de familias, mascotas, pasatiempos, comunidad, y un abrumador sentido de bondad. Porque Em era completamente vulnerable en su nota, ellos también lo eran. Em compartió chistes, así que ellos también compartieron chistes. Em compartió a su hermano, así que cada regalo que fue enviado vino duplicado. Em compartió a Taylor Swift, y resulta que la compañía está llena de “Swifties” encubiertos.
Un gerente de mantenimiento de Minnesota quería inspirarla a empezar a coleccionar sellos, así que envío dos sellos de su propia pizarra en su oficina para que empezara su colección. También enviaron sellos para que fueran usados, para que escribiera de vuelta, para que escribiera a otros. Sellos, sellos y más sellos (218, contó Em).
Pero había algo más en estas cartas. Las personas se sintieron vistas—algunas por primera vez en mucho tiempo.
“Trabajo solo en una pequeña y rural oficina postal …”
“Todos mis hijos viven lejos …”
“No muchas personas piensan en que tan duro trabajamos …”
Uno escribió, “No puedo decirte cuánto significa leer tu carta …”
Otro, “tengo un hijo en Kuwait y si tienes un segundo para enviarle una carta, le encantaría”.
Y otra, “Sé que no puedes responder a todos nosotros, pero ¿tal vez pueda escribirte de vez en cuando?”
Con docenas de nuevos amigos de correspondencia, Em hizo lo que sabe hacer mejor.
Escribió al padre.
Escribió a su hijo.
Aseguró a los Swifties secretos que no debían sentir vergüenza, porque a su papá también le gusta TSwift.
Reconoció que habían muchas cartas, pero que tenía tiempo. Las ve todas.
No estoy compartiendo esto porque soy un padre orgulloso. Estoy compartiendo esto porque es relativamente fácil, si nos damos el tiempo, dar a otros la cosa que necesitan para estar bien—conexión humana.
Tengo un amigo que dice que todos queremos ser una vistos, conocidos y amados. Em hace esto con audacia. Quiero ser atrevido y valiente como Em. Todos hemos estado en un momento de aislamiento físico que está amplificando una epidemia real de soledad, ansiedad, y depresión. Lo he estado sintiendo personalmente.
Durante la cuarentena, he respondido cientos de mensajes directos de personas que están sintiendo esta desconexión. Escuché de estudiantes de universidad a ejecutivos mayores que están estresados, preocupados o tienen miedo.
Tengo amigos y familia increíbles, pero la verdad es que necesitaba más. Y enviar mensajes de texto por una app ha sido el pequeño paso que necesitaba. La lección de Em para mi fue simple: son las cosas pequeñas las que importan más.
Envía una carta. Haz una llamada. Práctica el auto cuidado. Da un paso de atrevimiento. Por ti y por otros. Y agradece a tu cartero. Están trabajando extremadamente duro para mantenernos conectados a todos.
Y si has llegado hasta aquí, tienes que saber que puedes empezar las mismas olas de bondad con las personas con las que cuentas, respetas y amas. Solo diles que los extrañas, los amas, o solo los ves.
Tomado de rd.com A Girl Wrote a Simple Thank You Note to Her Postman and Got Hundreds of Responses