Venom, la importancia de invertir buen protagonista
Tom Hardy, el protagonista que da vida al antihéroe Venom, es sin duda uno de los mejores actores de nuestra época, y además carismático.
Hace algunos meses, las redes sociales y algunos cines se llenaron de un poster negro con 2 ojos blancos, los fanáticos se volvieron locos, estaban trabajando en la historia de uno de los antihéroes más carismáticos y queridos del Universo de Marvel.
La segunda sorpresa era el protagonista, un actor carismático y camaleónico que siempre le regala a las producciones cambios radicales en su aspecto físico y su voz para convertirse en quien interpreta. Tom Hardy es, sin duda, uno de los mejores actores de nuestra época.
La idea de volver al villano el protagonista de la historia no es mala, el problema es olvidar darle contexto y narrativa a este, hacerlo que exista en el mundo sin necesidad del contexto que el héroe le da por naturaleza.
En una historia equilibrada tiene que existir el lado bueno y el opositor, siendo Venom un antihéroe, nunca esperamos que él salvara el día en la trama de la historia, más bien era la presentación de un personaje que veremos en el futuro, conocer el inicio de su historia y su llegada a la tierra.
Y qué obtuvimos, mucha acción, persecuciones muy bien realizadas por las calles de San Francisco, pero en lo que respecta al guion de la película, se quedó flojo en muchas partes, carece de un argumento real, de un conflicto que se solucione, lleno de laberintos sin salida que se olvidan a la mitad de la película. Al final ni siquiera el motivo del villano se queda grabado en la memoria.
La película está llena de cabos sueltos que no se explican, brincan de una trama a otra sin terminar con la primera y sin mezclarlas, cada secuencia pertenece a un universo propio, los tres actos de la película podrían ser historias separadas una de la otra.
Pero no podemos ver lo malo porque realmente no todo lo es, hablemos de lo bueno, la apariencia física de Venom es maravillosa, la transformación de humano a simbionte no deja nada que desear y la pelea final entre ambos dejando ver al huésped es espectacular. Las persecuciones en las calles de San Francisco que aprovechan al máximo las subidas y bajadas de la ciudad para crear secuencias de acción emocionantes.
Lo mejor de la película y aquí vemos la importancia de invertir en un buen protagonista: Tom Hardy, quien a pesar de todas estas fallas logra rescatar un poco la película, con su carisma y ferocidad le da vida a un Eddie Brock bastante simpático, con sus cambios maravillosos en la tesitura de la voz le da personalidad a Venom y nos regala las mejores partes de la película al relacionarse con el “parásito” que ahora habita dentro de él.
A pesar de lo bueno y lo malo, ya puedes ir a su cine más cercano para ver la película de este antihéroe y no te desesperes, hay dos escenas poscréditos que no te puedes perder.