Durante las vacaciones, lo último en lo que quieres pensar es en dolores de cabeza o de estómago que arruinen la diversión.
Primero, investiga cómo lograr que tu viaje sea más saludable (hidratándote, levantándote a caminar, llevando tu propia manta, etc.) y, si viajas al extranjero, consulta si existen requisitos de salubridad que debas saber. Esto podría incluir una lista de riesgos, vacunas indispensables y hasta una lista de objetos recomendados.
Si tienes dudas, visita a tu médico algunas semanas antes del viaje y pídele orientación acerca de cuáles medicamentos llevar en tu botiquín de viaje. Podrá ofrecerte consejos específicos y recetarte sustancias que te protejan.
Estas son las recomendaciones con los medicamentos idóneos para llevar si piensas salir de viaje:
Comienza por las medicinas de patente que necesites y consérvalas en sus empaques originales para que sea fácil identificarlas. Pide a tu farmacéutico botellas pequeñas etiquetadas si las usuales son demasiado grandes y procura que las tapas sean a prueba de niños. También lleva una dosis que cubra varios días adicionales.
Sharon Carlson, directora de Preparación para Emergencias de Sharp Healthcare, San Diego, tiene otro consejo.
“Siempre recomiendo que las personas que necesitan tomar medicinas lleven una lista de sus recetas, incluyendo dosis y horas de toma, y los datos de contacto de su médico. Dobla esa pequeña lista y guárdala en tu bolso o billetera. Si te pasa algo, los paramédicos podrán consultar esa lista y saber qué medicamentos estás tomando.”
Para empezar, sigue ciertos cuidados para evitar enfermarte (como siempre beber agua embotellada y no comer en puestos callejeros), y anticipa las situaciones en las que podrías marearte. De acuerdo con Carlson, los problemas digestivos son algunos de los más frecuentes durante las vacaciones.
“Comer y beber en lugares que no acostumbras podría causar diarrea del viajero o lastimarte el estómago”, dice Carlson.
Asegúrate de llevar antiácidos para la indigestión y la gastritis, medicamentos contra la diarrea y remedios para rehidratar.
Carlson también cita a las quemaduras como otro riesgo –potencialmente serio– de las vacaciones. “Siempre hay que llevar protector solar; recomiendo un FPS mínimo de 15, quizá mayor”, explica. También sugiere usar lentes de sol y un sombrero de ala ancha para aumentar la protección. Aplica una loción refrescante a tu piel después de la sesión de bronceado.
Los dolores leves pueden tratarse fácilmente con medicamentos que no necesitan receta. Tanto el acetaminofeno y el ibuprofeno son recomendables, pero ten cuidado con las tabletas que contengan codeína porque son ilegales en algunos países. También descubrirás que hay productos genéricos que son más baratos que aquellos que tienen marca pero funcionan igual de bien: solo lee la etiqueta para asegurarte de que contengan los mismos ingredientes.
Las cortadas y ampollas necesitan estar cubiertos hasta que sanen, sobre todo en climas tropicales donde pueden infectarse con facilidad. Empaca banditas adhesivas, gasa estéril y algunas vendas pequeñas. También te servirá llevar microporo para sujetarlos y tijeras para ajustar el tamaño de las gasas.
Los productos antisépticos serán útiles para evitar que las infecciones o las ampollas se infecten. Úsalos para limpiar y esterilizar heridas y complementa el tratamiento con ungüento, pero consulta de inmediato a un médico ante la menor señal de infección.
Si te encuentras lejos de casa, ¿sabrás cuáles insectos o plantas pueden detonarte una reacción alérgica? Por si acaso, lleva antihistamínicos para controlar una reacción interna o externa (en tu piel). Algunos medicamentos pueden causar somnolencia, así que considéralo si manejarás o si planeas beber alcohol.
En el mejor de los casos, los insectos son molestos; en el peor, propagan enfermedades como malaria, Zika o dengue. Además de llevar medicamento contra la malaria si viajas a algún país donde sea endémica, siempre aplícate repelente contra insectos: la mejor forma de prevenir estas enfermedades es evitar las picaduras. Estos productos suelen estar disponibles en diferentes concentraciones; si vas a un lugar tropical, se recomienda una concentración mínima de 50 por ciento.
Si realizarás turismo de aventura o visitarás un país donde no se recomiende beber el agua, lleva tabletas purificadoras. Las tabletas pueden purificar hasta un litro de agua, aunque el proceso toma alrededor de 30 minutos.
Considera cada uno de estos puntos, pues sin duda, serán de vital ayuda si presentas malestares físicos durante tu viaje.
FUENTE: Reader’s Digest
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