Pon tu mente en tu dinero y tu dinero en tu mente, o mejor en tu cuenta bancaria con estos consejos de expertos para vivir libre de deudas.
Vivir con deudas puede ser increíblemente estresante. Preocuparse constantemente por pagarlas sin dejar de tener suficiente dinero para mantenerte a flote puede hacer que te sientas perdido como si estuvieras corriendo en un laberinto sin fin. Sin embargo, hay formas de evitarlas.
Puedes aprender cómo hacer un presupuesto, cómo evitar tarifas ocultas e incluso aprender lo que los ricos nunca compran para ayudarte a ahorrar un par de billetes.
Tener un plan significa tener un propósito. “Las personas que llevan una vida financiera saludable la mayoría de las veces tienen metas financieras claras y están trabajando activamente para lograrlas”, dice Yoni Dayan, editor en jefe de Money Under 30; agrega que “si tienen un objetivo por qué ahorrar, el cómo será mucho más natural”.
“Si tienes problemas con el gasto impulsivo, esperar unos días es un gran hábito”, explica Joe Udo de Retire By 40. “Puedes encontrar un precio más bajo o simplemente darte cuenta de que no lo necesitas después de todo”.
Si bien esto es particularmente útil cuando se trata de artículos caros, como un televisor nuevo o incluso un automóvil nuevo, también se puede aplicar a las compras diarias que pueden acumularse con el tiempo.
Shannah Compton Game, una planificadora financiera certificada y presentadora del Millennial Money Podcast, recomienda eliminar todas las opciones de pago automático o autocompletar en los sitios donde compras con frecuencia.
Esto te obliga a “pensar en cuánto dinero estás gastando antes de presionar el botón” comprar ahora”, dice.
Las fiestas sorpresa son geniales. Las facturas sorpresa no lo son. Para evitar adeudar a fin de mes, Erica Gellerman, creadora de The Worth Project, sugiere tratar tu tarjeta de crédito como una tarjeta de débito.
“Por ejemplo, si paso la tarjeta de crédito en el almuerzo por $10o y la gasolina por $40o, usaré la aplicación del banco para transferir $50o de mi cuenta corriente a mi tarjeta”, explica. “De esa manera no gastaré dinero que no tengo”.
Este consejo de Compton Game es genial: “Paga por adelantado tu tarjeta de crédito por todo lo que hayas presupuestado para la semana para tus gastos”, aconseja. Te ayudará a mantener tu saldo bancario bajo control y evitará que gastes dinero que no tienes.
Y nunca pagues con tarjeta de crédito estas cosas.
Hay una razón de dos palabras: pagos de intereses. Udo dice que cuando usas tarjetas de crédito, “siempre me aseguro de pagar la factura en su totalidad todos los meses. Tengo toda la comodidad sin tener que pagar intereses al banco”.
Si no puedes pagar todo, una buena regla general es no traspasar nunca más del 30 por ciento de tu límite de crédito al mes siguiente. Pagar tu saldo todos los meses es uno de nuestros principales consejos para mejorar tu puntaje crediticio.
Otra cosa a considerar si tienes una factura de tarjeta de crédito considerable cuando llega el día 31, es comenzar a pagar en efectivo.
Udo explica que esto no solo garantiza que estés viviendo dentro de tus posibilidades, sino que “la acción física de entregar dinero en efectivo a otra persona es mucho más difícil que deslizar una tarjeta”.
Es difícil recordar ahorrar dinero cada mes. Afortunadamente, Sophia Bera, CFP y fundadora de Gen Y Planning, tiene una solución engañosa. “Automatiza tus ahorros y contribuciones para la jubilación para que no tengas que pensar en ello y sigue progresando constantemente en tus objetivos”.
Más tiempo libre a menudo implica gastar más dinero, desde el brunch hasta la hora feliz y la compra de escaparates (que se convierte en compras reales). “No hay nada de malo en estas actividades, pero cuando las hacía por hábito, me di cuenta de que gran parte de mis gastos se destinaban a cosas que realmente no me importaban tanto”, dice Gellerman.
Ahora mantiene una lista de actividades económicas para intercambiar por sus pasatiempos más caros, como invitar a amigos o ir de excursión.
Por más nueva era que parezca, la ley de la atracción también se aplica al dinero. Cuanto mejor sea tu actitud hacia tus finanzas, mejores serán tus números. “Ven al dinero desde un lugar de disfrute y abundancia en lugar del miedo o la escasez”, Taylor Simpson, fundador de The Money Mindset Ma sterclass y la Abundant Life Experience, dice.
“Debes saber y creer que el dinero te llega fácilmente; cuando sientas esto, lo vivirás”. ¿Una forma de hacer eso? Di “gracias” cuando gastes dinero para empezar a verlo como algo que va y viene sin esfuerzo.
Según un estudio anual de GOBankingRates, en 2019, el 45 por ciento de las personas no tiene nada guardado. Nada. Sin embargo, para evitar endeudarte, debes tener suficiente reserva para poder cubrir un mínimo de tres a seis meses de gastos de manutención en caso de que ocurra algo drástico.
No importa qué. Eso significa que incluso si obtienes un aumento, comienza un trabajo paralelo o incluso gana la lotería, manténte firme con tu presupuesto original. Mejor aún, canaliza todos esos ingresos adicionales directamente a tus ahorros o al fondo de jubilación, para que ni siquiera sienta que se está perdiendo nada.
Sí, lo has escuchado antes, pero vale la pena repetirlo: Time, en asociación con NextAdvisor, analizó exactamente cuánto ahorrarías si cambiaras tu hábito de tomar café dos veces al día por café hecho en casa, y es mucho.
Suponiendo que gastas $ 2.75 cuando pasas por el carril de autoservicio dos veces al día, podría estar perdiendo $ 2,007.50 por año, en comparación con gastar solo $ 45 por año con café elaborado en casa. Algo a tener en cuenta es que el número podría ser mayor o menor, dependiendo de tu pedido.
Si tienes un hábito de café más caro, prepárate para gastar más por año.
Si tienes una meta financiera en mente, digamos que ahorres un fondo de emergencia antes de fin de año, haz un seguimiento de tu progreso para ver cómo te va. Ver que ese número aumenta cada vez que miras puede darte la motivación para mantener tus hábitos de gasto inteligentes en el buen camino.
O, si no ves que aumenta tanto como te gustaría, puedes ajustar tus hábitos de gasto para volver a encarrilarte. De cualquier manera, hacer un seguimiento de cuánto ahorras te ayudará a determinar si tus hábitos de ahorro son eficientes o no.
Es tentador agarrar algo que queremos o necesitamos tan pronto como lo vemos, pero los gastadores inteligentes saben comparar precios y ver dónde obtener la mejor oferta. Utilizan folletos, aplicaciones y sitios web para comparar precios.
Comparar precios puede reducir tus gastos y permitirte ahorrar dinero extra.
Tomado de rd.com 15 Everyday Habits of Debt-Free People
