El ejercicio con peso corporal ofrece beneficios únicos. No solo fortalece el cuerpo, también elimina excusas comunes como “no tengo tiempo” o “no tengo espacio en casa”. Solo necesitas tu cuerpo… y ganas de...
El ejercicio con peso corporal ofrece beneficios únicos. No solo fortalece el cuerpo, también elimina excusas comunes como “no tengo tiempo” o “no tengo espacio en casa”. Solo necesitas tu cuerpo… y ganas de moverte.
Es un tipo de entrenamiento que utiliza tu propio peso como resistencia para mejorar fuerza, resistencia, equilibrio y flexibilidad. Desde sentadillas hasta flexiones, no requiere pesas ni máquinas. Y, según los expertos de la Facultad de Medicina de Harvard, puede adaptarse fácilmente a tu condición física.
1. Súper conveniente
Puedes hacer ejercicio en cualquier lugar: tu recámara, la sala o incluso una habitación de hotel. No necesitas trasladarte a un gimnasio ni depender de aparatos complicados.
2. Cero inversión en equipo
Solo necesitas ropa cómoda y un par de tenis. A lo mucho, una silla o una toalla. Nada de membresías costosas o dispositivos voluminosos.
3. Menos intimidación
No tienes que enfrentarte a un gimnasio lleno de máquinas o personas experimentadas. Puedes empezar en privado, a tu ritmo, y ganar confianza poco a poco.
4. Es realmente efectivo
Un estudio publicado en Physiology and Behavior encontró que 10 semanas de ejercicios con peso corporal mejoraron la capacidad aeróbica en un 33 %, la resistencia muscular del torso en un 11 % y la potencia del tren inferior en un 6 %. Incluso la flexibilidad aumentó.
5. No necesitas mucho tiempo
En adultos mayores de 60 años, un estudio japonés mostró que hacer solo seis entrenamientos al mes (con ocho ejercicios sencillos para piernas) incrementó la fuerza y potencia muscular en un 15 % en 10 meses. ¡Con poco esfuerzo, grandes resultados!
6. Promueve el movimiento funcional
A diferencia de las máquinas que trabajan músculos aislados, el ejercicio con peso corporal involucra varios músculos y articulaciones al mismo tiempo. Mejora el equilibrio, la coordinación y simula movimientos de la vida diaria.
7. Se adapta a ti
¿Te parecen difíciles las flexiones? Hazlas contra la pared. ¿Quieres más intensidad? Aumenta repeticiones o cambia el ritmo. Hay formas seguras de progresar sin equipo.
Más allá del rendimiento físico, este tipo de entrenamiento se relaciona con beneficios para la salud general: menor riesgo de enfermedades del corazón, diabetes, sobrepeso, ciertos tipos de cáncer, dolor articular e incluso Alzheimer. También mejora el estado de ánimo, el sueño y la autoestima.
Si buscas una forma práctica, económica y efectiva de mantenerte en forma, el ejercicio con peso corporal es una excelente opción. Empieza donde estás, con lo que tienes… y fortalece tu cuerpo para vivir mejor.
