La tía de un amigo mío empezó a interesarse en la comida saludable antes de que cualquier persona siquiera lo considerara en Mississippi. Encargaba legumbres, frutos secos y polvos por correo. Por supuesto, ella se mantuvo en forma y jamás se enfermó. Sin embargo, según su familia, no era así como el Señor quería que nos alimentáramos. Ya a una edad avanzada, la tía de mi amigo entró en estado de coma.
—¿Lo ven? —dijeron sus familiares— Cuando llegó su hora, su mente se fue, pero su cuerpo estaba demasiado sano para hacer lo mismo.
Roy Blount Jr., en Garden and Gun
En Twitter, la gente a veces me dice: “¿Por qué no te reservas tus opiniones?”. Suelo responder: “Eres tú quien me sigue. Yo no te tuiteé a ti”. Es como ir a un tablero de anuncios en el centro de la ciudad, ver un letrero de clases de guitarra y gritar: “¡No me interesa tomar clases de guitarra!”.
Ricky Gervais, en GQ
Me pregunto qué pasó con la máxima médica “Lo primero es no hacer daño”. Cierta vez, mientras pagaba la factura en el consultorio del médico, noté que escurría un poco de sangre por mi pierna. Resulta que la vendita adhesiva que me habían puesto tras un sencillo procedimiento, se desprendió.
—Estoy manchando el piso de sangre —le comenté a la recepcionista.
Ella levantó la vista de inmediato, alarmada, y dijo:
—Gracias por avisarme. Llamaré al personal de limpieza
Olga Arnold, Canadá
Uno de los maestros de la escuela donde trabajo les encargó a sus alumnos un ensayo de dos páginas sobre alguno de los pecados capitales. El día de la entrega, oí por casualidad a un estudiante decirle a un compañero suyo:
—La tarea estuvo muy fácil. Lo único que hice fue escribir una página y le puse doble espacio.
—¿Qué pecado escogiste? —quiso saber su amigo.
—La pereza.
Downs Georgina, Reino Unido
Envié un correo electrónico a la biblioteca de la Universidad de Louisiana, donde trabajo, y rebotó con un mensaje que explicaba que el Edificio de Bellas Artes estaba “experimentando problemas con el correo electrónico y el Internet, debido a un corte de electricidad en el Auditorio Cavanaugh. Si necesita ayuda para localizar a alguien en ese edificio, llame por teléfono. Por favor, también recuerde que, a causa de la interrupción eléctrica, el edificio no cuenta con servicio telefónico”.
Jana Aitch, Reino Unido
Repleta de reseñas enviadas por comensales de todas partes, la guía Zagat Survey es la Biblia de las personas que comen fuera. Pero, afortunadamente para algunos restaurantes, no todas las evaluaciones —como las que compartimos a continuación— aparecen publicadas.
Arthur Smith, Reino Unido
