Cuando la tecnología afecta la relación entre padres e hijos
Un estudio menciona que nueve de cada diez papás usan la tecnología en presencia de sus hijos y en momentos de convivencia familiar.
Un estudio menciona que nueve de cada diez papás usan la tecnología en presencia de sus hijos y en momentos de convivencia familiar.
El uso del teléfono inteligente y de internet en México se ha convertido en una de las principales actividades que los mexicanos realizan diariamente, tanto así que, de acuerdo con la Asociación de Internet.mx, 84 por ciento de los internautas en el país asegura que la web es parte de su vida cotidiana.
Además, la consultora IAB México expone que 89 por ciento de los internautas se conecta a la red mediante un teléfono móvil todos los días.
Más allá de la adicción a un smartphone, los efectos han alcanzado a un sector de la población que podría estar en riesgo: los niños. Por esta razón, Alejandra Corona — catedrática de Maestría en la Universidad Iberoamericana— se dio a la tarea de analizar el fenómeno y escribió el libro ‘Huérfanos digitales’, que habla sobre los riesgos que enfrentan los hijos de los padres que abusan del teléfono inteligente y otros dispositivos móviles en momentos de convivencia familiar.
“Los niños de 0 a 12 años están en pleno desarrollo emocional, cognitivo y social; no darles la atención adecuada puede traerles problemas; y el índice más alto de adicción al teléfono móvil se presenta en madres latinoamericanas, principalmente en mujeres que son mamás por primera vez” señala Alejandra Corona, licenciada en Relaciones Industriales por la Universidad Iberoamericana y maestra en Diseño Estratégico e Innovación por la misma Universidad.
La autora realizó entrevistas y encuestas a niños, padres de familia, profesores y psicólogos sobre sus hábitos de convivencia familiar y uso de sus equipos móviles, además de realizar actividades de observación en espacios públicos en los que los padres de familia “conviven” con sus hijos.
Por otro lado, Alejandra Corona se apoyó en un estudio realizado por los psicólogos estadounidenses McDaniel (Universidad de Illinois) y Rodesky (Universidad de Michigan), quienes analizaron a casi 200 familias y acuñaron el término technoference, a quien Alejandra Corona tropicalizó como tecnointerferencia, que se refiere al bloqueo que hacen los padres de familia hacia sus hijos debido al uso del móvil y otras tecnologías.
Ellos encontraron que 9 de cada 10 papás usan la tecnología en presencia de sus hijos y en momentos de convivencia familiar, lo que puede ocasionar tecnointerferencia.
Los principales daños causados en los niños por este fenómeno son:
De estos, el más grave es la baja autoestima del niño, ya que va sintiéndose menos importante que el gadget de sus padres.
No obstante, en el libro no sólo se habla del problema, sino que la autora propone soluciones estratégicas para resolverlo. El análisis no sataniza a la tecnología, sino que da a conocer el fenómeno y brinda varias soluciones, entre ellas, alternativas tecnológicas.
Alejandra Corona expone que la solución integral incluye hacer conciencia del problema, después implementar un modelo de coaching y finalmente utilizar una aplicación móvil que sin causar lo que quiere combatir, o sea, la tecnointerferencia, y haciendo uso de la inteligencia artificial y de los datos que obtenga del teléfono, puede apoyar a los padres a convivir más con sus hijos.