El arte, herramienta contra el Alzheimer
El Alzheimer es la forma más frecuente de trastorno neurocognitivo mayor, pues concentra entre el 60 y el 70 por ciento de los casos.
El Alzheimer es la forma más frecuente de trastorno neurocognitivo mayor, pues concentra entre el 60 y el 70 por ciento de los casos. Los beneficios son un mejor pronóstico, mayor recuperación y mejor calidad de vida.
Especialistas en psicogeriatría y neurología concluyeron que la expresión artística puede complementar el tratamiento integral de un paciente con trastornos neurocognitivos mayores como el Alzheimer, pues permite a las personas canalizar sus sentimientos al reflejar su sufrimiento y crear lo que se puede considerar como un arte primigenio, es decir que viene desde lo más profundo del ser humano.
Durante el evento RECORDARTE —organizado por Lundbeck México para discutir sobre la relación del arte y la salud mental— el Dr. Juan Manuel Salgado Camacho, jefe de Neurocirugía y Neurociencias del Hospital Regional de Alta Especialidad, quien además cuenta con una maestría en Arte Moderno y Contemporáneo en Casa Lamm, dijo que es indudable que los trastornos neurocognitivo mayores como el Alzheimer, así como otros padecimientos mentales, son en infinidad de casos una fuente de inspiración artística.
“En la medida en que ciertas demencias afectan capacidades cognitivas como el lenguaje, el pensamiento, la capacidad de planear, tener deseos, ilusiones, aspiraciones y sentimientos, los pacientes van liberando habilidades creativas” aseguró el galeno.
“Esto no significa que todas las personas con Alzheimer tengan habilidades para el arte, sin embargo, es un hecho, que esta práctica beneficia tanto a pacientes con trastornos neurocognitivos mayores, como a aquellos que tienen alteraciones neurológicas en general. También ayuda a que otro grupo de pacientes que han tenido eventos vasculares cerebrales o secuelas por cirugía o por tumor puedan tener un mejor pronóstico, mayor recuperación y sin duda mejor calidad de vida”.
Según la Organización Mundial de la Salud, la demencia es un trastorno neurocognitivo mayor que engloba a varias enfermedades progresivas que afectan a la memoria, así como a otras capacidades cognitivas y al comportamiento. Es catalogada como un síndrome que implica el deterioro de la memoria, el intelecto, el comportamiento y la capacidad para realizar actividades de la vida diaria.
La enfermedad de Alzheimer es la forma más frecuente de trastorno neurocognitivo mayor, pues concentra entre un 60 y un 70 por ciento de los casos, y afecta con más frecuencia a las mujeres. Aunque ataca principalmente a las personas mayores, no constituye una consecuencia normal del envejecimiento. Otros tipos de demencia frecuentes son la demencia vascular y las formas mixtas.
Los expertos asistentes al evento también compartieron que existen tratamientos que han demostrado efectividad para ayudar a pacientes de Alzheimer en las áreas funcional y conductual. Diversos ensayos clínicos controlados y aleatorizados con sales como la memantina demostraron que pueden ofrecer una mejoría en las actividades de la vida diaria, proporcionando más independencia al paciente, al requerir menor cuidado.
Por su parte, la Dra. Marlene Ángeles Lomelí, psicogeriatra por el Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente Muñiz, manifestó que es muy importante que los pacientes con trastorno neurocognitivo mayor o Alzheimer sean tratados de manera integral con medicamentos que mejoren su área cognitiva, afectiva y conductual además de que los pacientes, sus familiares y cuidadores, cuenten con información de valor para enfrentar el padecimiento.
“Aún hay mucho que hacer con este tipo de pacientes y sus familiares. Para empezar, los podemos ayudar con acciones sencillas como considerar el ambiente donde desarrollan sus actividades diarias, cuidar el tipo de luz en casa, tomar medidas sobre el sueño, alimentación y sugerir la estimulación cognitiva; así como las técnicas de reminiscencias, enfocadas a estimular las funciones que el paciente aún conserva; por ejemplo, realizar destrezas mentales, como jugar dominó, escuchar música o involucrarlos en el arte”, concluyó.