Evita un embarazo no planificado durante la pandemia
Millones de millones de mujeres del mundo podrían tener un embarazo en los próximos seis meses derivado del confinamiento por Covid-19.
Aunque los sistemas de salud están prácticamente enfocados a la atención del coronavirus, recientemente el Gobierno Federal emitió un acuerdo sobre las acciones esenciales para la atención y protección de niños y adolescentes durante esta emergencia sanitaria, incluido el embarazo.
El acuerdo solicitó a las instituciones de salud esforzarse al máximo en la prevención de embarazos en adolescentes y garantizar el acceso a métodos anticonceptivos y consejería para este grupo poblacional. En México anualmente se registran más de 390,000 nacimientos en menores de 19 años, lo que significa más de 1000 nacimientos diarios.
En sintonía con la Estrategia Nacional de Prevención del Embarazo en Adolescentes —que contempla la reducción en un 50 por ciento la tasa de fecundidad de las adolescentes para el 2030— ya está disponible en instituciones de salud pública como el IMSS y Secretaría de Salud el nuevo implante anticonceptivo subdérmico con levonorgestrel que ofrece protección hasta por cinco años.
Los adolescentes representan el 16 por ciento de la población en México, es decir, unos 24 millones de jóvenes. Entre este grupo poblacional cada año se registran 400,000 nacimientos, es decir, de cada 1,000 adolescentes 73 se embarazan, explicó Josefina Lira Plascencia, presidenta del Colegio Mexicano de Especialistas en Ginecología y Obstetricia (COMEGO).
El embarazo no planeado entre adolescentes llega al 48 por ciento, una cifra preocupante, pues el uso de la anticoncepción en la primera relación marca el comportamiento en planificación que tendrá ese adolescente en sus futuras relaciones.
Ante este panorama es fundamental que se realice una mayor difusión entre esta población de los anticonceptivos de larga duración reversibles, sobre todo ahora que por efectos de la pandemia se calcula que más de 47 millones de mujeres en el mundo podrían perder acceso a las píldoras de anticoncepción. En México la situación es igual de grave.
En 2012 se publicaron los resultados de un estudio elaborado en Minneapolis, una ciudad estadounidense donde el embarazo adolescente no planificado es alto.
A todas las participantes —mujeres de 25 años en promedio— se les ofreció un método de larga duración. El 75 por ciento eligió el implante subdérmico y este fue el resultado: la tasa de aborto bajó de 13 a 5 abortos por cada 1,000 mujeres y la tasa de embarazo adolescente pasó de 34 a seis por cada 1,000 adolescentes.
El primer eslabón de la pobreza es la maternidad temprana; perpetúa la pobreza de la mujer, de la familia, de la sociedad, del país, destaca Lira Plascencia. Ante ese panorama un anticonceptivo reversible de larga duración puede ayudar a que México deje de ostentar el primer lugar de embarazo adolescentes entre mujeres de entre 15 y 19 años.
Las mujeres buscan anticoncepción altamente efectiva, de uso sencillo y cómodo, con un nivel bajo de hormonas, con efectos secundarios mínimos y vuelta rápida a la fertilidad, explica Georgina Ruvalcaba, gerente médico de Innovative Women’s Health de Bayer de México. Tales características las cumple el implante subdérmico, uno de los diversos Anticonceptivos Reversibles de Acción Prolongada (ARAP).
Este implante otorga protección hasta por cinco años y es recomendado por asociaciones gineco-obstétricas en el mundo como una opción para mujeres jóvenes y muy jóvenes, ya que por su alta tasa de efectividad y continuidad se adaptan a las necesidades de este grupo poblacional.
Incluso la Organización Mundial de la Salud destaca que estos métodos pueden emplearse en mujeres jóvenes y que aún no han tenido hijos. De hecho, el implante puede ser utilizado desde los 10 años de edad.
El implante subdérmico se compone de dos barras delgadas y flexibles de tamaño similar a un cerillo. Tiene una tecnología de liberación prolongada, es decir, cada día durante un lustro será liberada una pequeña dosis de levonorgestrel, hormona encargada de brindar protección anticonceptiva, comparable a la esterilización femenina.
De acuerdo con la Dra. Georgina Ruvalcaba, Gerente Médico de Innovative Women´s Health de Bayer de México, su colocación es ambulatoria, pues solo requiere anestesia local y 70 segundos para su aplicación.
El inicio de la vida sexual a edades más tempranas, la falta del uso regular de métodos anticonceptivos y las limitaciones en su acceso, incrementadas en tiempos de pandemia, colocan a estos métodos anticonceptivos de largo plazo como la estrategia para controlar y revertir el embarazo no planificado en adolescentes.
Además, ofrece los índices más altos de protección y su eficacia no se ve afectada por errores en su uso, olvidos o abandono, en relación con otros métodos de uso regular para el control de la fertilidad, expresó la Dra. Lira Plascencia.
Entre los métodos ARAP, el implante anticonceptivo subdérmico con levonorgestrel es uno de los más convenientes tanto para las jóvenes como para las instituciones públicas que lo proporcionan, ya que su rango de efectividad es superior al 99 por ciento.
Además, debido a su largo tiempo de protección anticonceptiva se convierte en un método confiable, discreto y cómodo para las mujeres y costo-efectivo para las instituciones de salud, mencionó la Dra. Yasmín López Vera, médico gineco-obstetra adscrita al Hospital de la Mujer de la Secretaría de Salud de Michoacán.
El implante subdérmico también es muy recomendable para después de nacimiento del bebé, pues en México la planificación familiar después de un embarazo solo es practicada por el 46 por ciento de los adolescentes.
Por su efectividad y comodidad, este método alcanza el 81 por ciento de continuidad a dos años y el 71 por ciento a tres años.
“Es un método que requiere poco mantenimiento, de hecho la OMS indica que no son necesarias las visitas al médico mientras se usa, pero en México se prefiere que las mujeres regresen a su clínica de manera periódica para realizarles el Papanicolau y para reforzar la consejería, pues es bueno que se sientan con el derecho de adopta un método seguro y eficaz” explica Yazmín López Vera, médico gineco-obstetra.
El reto de las mujeres, dice la especialista, es que sepan que tienen el control sobre cuántos, cuándo y con quién quieren tener hijos.
Este nuevo método anticonceptivo reversible de acción prolongada se halla entre las alternativas disponibles en todas las instituciones del sector salud de forma gratuita para las mujeres jóvenes en edad reproductiva.