La depresión afecta más que las enfermedades crónico degenerativas
En las personas mayores, la depresión es difícil de detectar porque los síntomas pueden confundirse con el proceso natural de envejecimiento.
La depresión se define como el conjunto de síntomas que se manifiestan por la pérdida de interés y la incapacidad de satisfacción por las actividades y experiencias de la vida diaria que incluye desmotivación, alteraciones emocionales, cognitivas, físicas y conductuales.
De acuerdo con cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), más del 4% de la población mundial vive con depresión y los más propensos a padecerla son las mujeres, los jóvenes y personas de la tercera edad, refirió el doctor Felipe Vázquez, especialista en Psiquiatría.
En las personas mayores de 65 años, la depresión es el trastorno psiquiátrico más frecuente, pero es difícil de detectar porque los síntomas que presenta pueden confundirse con el proceso natural de envejecimiento o de alguna otra enfermedad, algunos de ellos son:
En nuestro país, este grave problema de salud pública afecta a una de cada cinco personas antes de los 75 años, lo cual impacta su calidad de vida incluso más que algunas enfermedades crónico degenerativas tales como diabetes mellitus, hipertensión arterial y artritis reumatoide.
La depresión en la vejez suele ser crónica, sus consecuencias físicas y mentales pueden complicar un problema de salud ya existente, e incluso detonar pensamientos suicidas, pues se estima que en este grupo de edad las tasas de suicidio son de aproximadamente el doble que la de los jóvenes, aunque en las décadas recientes ha aumentado el riesgo entre jóvenes de 14 a 25 años.
La clave para prevenir la depresión en los adultos mayores es incluirlos en las actividades de la familia y la sociedad, hacerles partícipes en la toma de decisiones y actividades cotidianas, además de respetar su autonomía y dar atención oportuna a las situaciones que puedan representar un factor de riesgo, los médicos de cuidados primarios deben estar atentos ante esta posibilidad y utilizar herramientas de detección clinimétrica y hacer preguntas como ¿Ha dejado de disfrutar la vida? ¿Se siente triste la mayor parte del tiempo? ¿Siente que le ha fallado a su familia? ¿Tiene la sensación de estar siendo castigado? ¿Se ha notado lento o demasiado inquieto?
La indiferencia y discriminación hacia los adultos mayores que sufren este padecimiento, provocan un sufrimiento adicional al que produce en sí la enfermedad, por ello es importante recibir la atención adecuada y el apoyo familiar.