Si bien es normal tener lagunas mentales ocasionales, es importante prestar atención a cambios significativos en la memoria y buscar ayuda médica si es necesario.
La memoria es una de las funciones cognitivas más importantes de nuestro cerebro. Nos permite recordar información, eventos pasados, rostros familiares y experiencias significativas. Sin embargo, en ocasiones, todos experimentamos lo que se conoce como “lagunas mentales”, momentos en los que no podemos recordar algo que normalmente deberíamos recordar.
¿Por qué ocurre esto? ¿Cuáles son las causas detrás de estas lagunas mentales?
En este artículo, exploraremos este fenómeno y desentrañaremos los misterios de la pérdida de memoria.¿Alguna vez has tenido problemas para recordar algo? ¿Una fecha, dónde dejaste las llaves, un nombre, o algo que recientemente viviste o viste? Quizá te hayan dado lagunas mentales y es momento de ponerles un freno.
También conocida como amnesia lacunar o amnesia localizada, las lagunas mentales son episodios en donde la memoria de una persona se ve afectada de tal forma, en la que no le es posible acceder a un recuerdo específico.
Pueden ser causadas por una variedad de factores, como:
Y si bien la mayoría son normales y no son motivo de preocupación (a menos que las estés padeciendo con frecuencia, en ese caso ve al médico), suelen dejarnos una sensación de intranquilidad y cierta impotencia, y hasta causarnos problemas.
De acuerdo a una investigación científica publicada en la revista Frontiers in Neuroscience la luteolina –un flavonoide antioxidante que sirve para proteger a la inflamación de los tejidos del cuerpo humano- puede ayudar a disminuir la presencia de lagunas mentales al reducir la inflamación en el cerebro, limitar el estrés oxidativo, inhibir la actividad de los virus y reducir el deterioro cognitivo.
Así mismo, es importante seguir una dieta equilibrada y saludable que incluya alimentos que sean ricos en nutrientes importantes para el cerebro, como las vitaminas B, C y E, así como ácidos grasos omega-3 y antioxidantes. Algunos alimentos que se sabe que mejoran la memoria y el rendimiento mental incluyen:
el salmón, las sardinas y otros pescados grasos son ricos en ácidos grasos omega-3, que se ha demostrado que mejoran la memoria y el rendimiento cognitivo.
Son alimentos que protegen al cerebro, estimulan la memoria y ralentizan el deterioro cognitivo. No dejes fuera de la dieta al yogur, los quesos, el pan, la kombucha, los búlgaros y el vinagre.
las frutas y verduras frescas, especialmente las manzanas, los plátanos, las espinacas, las bayas, el brócoli y los tomates, contienen antioxidantes y vitaminas que ayudan a proteger el cerebro y mejorar la memoria.
Las almendras, nueces, semillas de girasol y de calabaza son ricas en vitamina E y ácidos grasos omega-3, que son fundamentales para una buena salud cerebral.
Los huevos son una buena fuente de colina, un nutriente esencial para la memoria y la función cerebral, que se encuentra presente en la yema.
El chocolate negro contiene flavonoides, que son antioxidantes que ayudan a proteger el cerebro y mejorar la memoria,
La cafeína presente en estas bebidas ofrece energía al organismo y estimulan de forma positiva el funcionamiento mental.
Identificar si has tenido una laguna mental puede ser un desafío, ya que a menudo es difícil recordar los momentos en los que no recuerdas algo (valga la redundancia). Sin embargo, aquí hay algunas señales que podrían indicar la presencia de una laguna mental:
Es importante tener en cuenta que todos experimentamos olvidos ocasionales y pequeñas lagunas mentales, lo cual es normal.
Sin embargo, si notas un patrón persistente de pérdida de memoria o si las lagunas mentales comienzan a afectar significativamente tu vida diaria o tu funcionamiento general, es recomendable buscar atención médica para una evaluación adecuada.
Con información de QG
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