La risa, remedio infalible: Mi papá era médico
Una mujer joven se dirige a la terraza del hotel donde se hospeda para tomar el sol. Como no ve a nadie, decide quitarse el traje de baño...
“Mi papá era médico, y yo era un niño bastante hipocondriaco. ¿De qué otra manera habría podido llamar su atención?”
Marc Maron, comediante
Es indispensable tener un buen vocabulario. Si hubiera yo sabido la diferencia entre “antídoto” y “antártico”, uno de mis mejores amigos seguiría con vida.
John McDowell, comediante
¿Quién dijo que de nada sirve llorar por la leche derramada? Sin duda alguien que jamás se extrajo leche de un seno y la derramó sin querer.
Vanessa Marchal, Estados Unidos
“Me diagnosticaron trastorno de personalidad antisocial, así que me uní a un grupo de apoyo. Nunca tuvimos reuniones”.
Craig Sharf, comediante
La comediante Sarah Silverman publicó el siguiente tuit: “Cuando tus parientes te saquen de quicio, cierra los ojos y piensa que es un diálogo de una película de Woody Allen”. La actriz Mia Farrow le respondió: “Eso intenté, pero no funcionó”.
Dos sujetos van de cacería a un lago, y uno de ellos mata un pato. En seguida, su perro cobrador camina sobre el agua y recupera el ave.
—¡Tu perro acaba de caminar sobre el agua! —exclama su amigo, sorprendido—. ¡Es increíble!
—En realidad, no —responde el otro cazador—. Lo que pasa es que no sabe nadar.
R. S., Estados Unidos
Una mujer joven se dirige a la terraza del hotel donde se hospeda para tomar el sol. Como no ve a nadie, decide quitarse el traje de baño para lograr un bronceado más parejo. Poco después oye a alguien subir corriendo por las escaleras.
—Disculpe, señorita —le dice con voz jadeante el gerente del hotel—. ¿Podría ponerse el traje de baño?
—Pero si estoy sola —responde ella—. ¿A quién le afecta?
—A muchas personas —señala el gerente—. ¡Está acostada sobre el tragaluz del restaurante!
L. B. Weinstein, Estados Unidos