Un colchón adecuado no solo te ayuda a que mantengas la buena salud de tu espalda, sino que aumenta tu calidad de vida porque te proporciona un descanso adecuado. Pero como en el mercado existe una infinidad de modelos, en ocasiones es difícil saber cuál es el que más te conviene.
¿Cuál es el mejor colchón para mí?
De muelles, de espuma, de látex, viscoelásticos. Uffff ¿por cuál decidirse?
Para echar un poco de luz sobre este asunto, el doctor Alex Ferré Masó, médico especialista en trastornos del sueño, recomienda en su blog que analices cómo duermes.
Si duermes boca arriba, en posición supina, sobre la espalda, elige colchones duros.
Si duermes de lado, te puede convenir un colchón de menor firmeza, que permita al hombro hundirse levemente, hasta encontrar una posición cómoda.
¿Cuánto pesas?
Si pesas bastante, necesitarás colchones firmes que ofrezcan buena sujeción, pues en un colchón blando te hundirías demasiado.
Las personas más ligeras necesitan también colchones de mayor flexibilidad, que se adapten a su forma para repartir mejor el peso.
Aunque depende del gusto de las personas, Colchones.es, grupo especializado en ventas de equipos de descanso, de 0 a 10 años recomiendan colchones con una firmeza de 3 o superior, de 10 a 20 años elige de 4 en adelante. Si pesas más de cien kilos, se aconseja una firmeza superior a 4 y colchones de muelles.
¿Te mueves mucho?
Si te mueves mucho mientras duermes te conviene un colchón firme que te permita que gires sin esfuerzo, pues en un colchón blando te hundirías demasiado y sería más difícil moverte.
¿Eres muy caluroso?
Si pasas calor, sudas con facilidad o vives en un lugar cálido, los colchones de muelles son para ti, pues se ventilan mejor y son más frescos. Si por el contrario, eres friolento o vives en un lugar con bajas temperaturas, los modelos de espuma, de látex o de material viscoelástico guardarán mejor el calor.
Apapáchalo
Para conservar las características de confort y resistencia durante años, sobre todo en los colchones látex, Colchonparati, una web especializada en venta online de colchones, te sugiere:
Mensualmente, durante el primer año de uso y posteriormente cada 3 meses como mínimo, gira el colchón en sentido “cabecero-piecero” y voltea el mismo de arriba – abajo. De esa forma evitarás posibles apelmazamientos de los materiales exteriores. En algunos colchones no es necesario este proceso debido a su composición.
El colchón no debe doblarse, ni ser forzado para introducirlo por puertas ni ascensores, pues determinados modelos de colchones están dotados de una varilla estabilizadora de contorno que quedaría deformada y afectaría al rendimiento del mismo.
Por higiene y un correcto mantenimiento del tejido del colchón, si utilizas funda protectora, asegúrate de que tanto la medida de ésta, como la de las sábanas ajustables, sean adecuadas al colchón, ya que un esfuerzo excesivo aplicado sobre las esquinas, podría ser causa de deformación.
Asegúrate de que la base destinada a apoyar el colchón sea rígida o flexible, pero uniforme, pues de no ser así transmitirá las irregularidades sobre la carcasa del colchón.
Si quieres mantener impecable tu colchón, se recomienda limpieza en seco de la funda.
Pues ahora ya sabes cómo obtener el descanso que mereces.
