Quejas comunes de hermanos y cómo afrontarlas
Los hermanos de niños con problemas de aprendizaje y de atención podrían pensar, a veces, que la vida es injusta y que ellos no obtienen suficiente atención.
Los hermanos de niños con problemas de aprendizaje y de atención podrían pensar, a veces, que la vida es injusta y que ellos no obtienen suficiente atención.
A continuación cuatro quejas comunes y sugerencias para responderlas.
Situación: A tu hijo con dificultades de aprendizaje y de atención le encantan los juegos de fútbol de su hermana. Sin embargo, es muy ruidoso y aplaude en momentos inapropiados.
Trata de no decir: “¿Cuál es el problema?”
Respuesta apropiada: “Sé que te da vergüenza cuando tu hermano viene a verte jugar, pero él disfruta mucho ver tus partidos. Vamos a pensar cómo podemos ayudarlo para que no perturbe. ¿Qué te parece si lo ayudo a que celebre en el momento oportuno?”
Situación: El tutor es un sacrificio financiero, pero tu hijo está reprobado en una materia.
Trata de no decir: “¿Te gustaría ponerte en los zapatos de tu hermano? Entonces entenderías”.
Respuesta apropiada: “La educación es una prioridad y por eso gastamos dinero en eso. Vamos a pensar cómo puedes aprender a tocar la batería”.
Situación: Tu hija le pega a su hermano porque agarró sus calcomanías.
Trata de no decir: “Yo espero que entiendas que para ti las cosas son más fáciles”.
Respuesta apropiada: “Puedo darme cuenta que eso te enojó mucho, pero recuerda que no se pega ni se empujar en esta familia. Yo espero que respetes esa regla. Vamos a encontrar un lugar para tus cosas donde tu hermano no las agarre”.
Situación: Le das a tu hijo menos tareas que a tu hija.
Trata de no decir:“No todo en la vida es justo”.
Respuesta apropiada: “Tu hermano tarda lo mismo que tú en terminar las tareas. Cuando sus habilidades mejoren, él podrá hacer más”.
Fuente: Understood, comunidad virtual estadounidense especializada en crianza conformada por 15 organizaciones sin fines de lucro.