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¿Te quemaste la boca? Aplica estos consejos
Tomar una bebida caliente, saborear un bizcocho de microondas, morder una pizza crujiente: todo ello puede causar insoportables quemaduras dentro de la boca.
Tomar una bebida caliente, saborear un bizcocho de microondas, morder una pizza crujiente: todo ello puede causar insoportables quemaduras dentro de la boca.
Tomar una bebida caliente, saborear un bizcocho de microondas, morder una pizza crujiente: todo ello puede causar insoportables quemaduras dentro de la boca.
El paladar es muy delgado y se quema con facilidad. Como toda otra lesión, este tipo de quemaduras toma tiempo en sanar. Por sí sola, tu boca deberá curarse por completo en una semana, pero puedes reducir ese tiempo si actúas con rapidez para enfriar la quemadura.
Al igual que una quemadura de la piel, lo mejor es enfriar la escaldadura bucal. Y el modo más fácil es con agua fría. Durante cinco a 10 minutos solo enjuágate, escupe y haz gárgaras con agua fría hasta reducir el dolor en la boca.
Un método aún más rápido es usar hielo. Consigue uno rápidamente y chúpalo hasta detener el escozor.
Tras acabar el enfriamiento inicial, enjuágate y haz gárgaras con solución salina. Mezcla media cucharadita de sal en un vaso de agua tibia y enjuágate la boca, pero sin tomártela. La sal es antiséptica y limpiará y desinfectará la quemadura.
El modo más rápido y rico de enfriar una quemadura bucal causada por pizza —en especial si es niño— es con una cucharada, o tres, de helado.
Unos días después de haberte quemado la boca, evita las bebidas calientes. Deja entibiar el té y el café antes de acercarlos a tu boca o de plano toma bebidas frías por unos días.
Temporalmente borra del menú el pan duro; haz lo mismo con las barras, las zanahorias crudas y las manzanas frescas. Cualquiera de estos alimentos puede arañar una quemadura durante la curación.
También evita el picante, pues irrita la piel dañada.
Las hojas de zarzamora tienen propiedades antibacteriales y antiinflamatorias. Prepare un extracto añadiendo 10 gramos de hojas secas en 100 mililitros de agua fría. Hierve y deja reposar 15 minutos. Cuela, si quieres endulza con miel, enjuágate y haz gárgaras con ella las veces que desees.
Fuente: Extracto del libro ‘1001 remedios caseros. Tratamientos confiables para problemas de salud cotidianos’ editado por Selecciones Reader’s Digest.
