¿Lo Sabías?
La conexión intestino-cerebro
Lo que comemos también tiene una gran influencia en nuestra salud mental.
Lo que comemos también tiene una gran influencia en nuestra salud mental.
Un médico de las estrellas dice que las emociones pueden ser una de las peores causas de inflamación en el cuerpo y que puede provocar varias enfermedades.
Aquí está su secreto para recalibrar tu conexión intestino-cerebro.
Una de las tantas frases memorables del padre de la medicina moderna, Hipócrates, es: “Que tu medicina sea tu alimento, y el alimento tu medicina. El Dr. Will Cole, IFMCP, DNM, DC , experto en medicina funcional y asesor de figuras de alto perfil como Gwyneth Paltrow y Drew Barrymore, dice que comer una dieta rica en nutrientes se asocia con un menor riesgo de casi todas las enfermedades crónicas, pero con lo que alimentamos nuestro intestino va mucho más allá de los beneficios físicos .
“Nuestro intestino (sistema intestinal) y nuestro cerebro se forman a partir del mismo tejido fetal cuando crecemos en el útero de nuestra madre, y están inextricablemente unidos por el resto de nuestras vidas a través de lo que se conoce como el eje intestino-cerebro”, dijo.
En pocas palabras, esto significa que lo que comemos también tiene una gran influencia en nuestra salud mental.
Pero en su libro de marzo de 2023, Gut Feelings: Healing the Shame-Fueled Relationship Between What You Eat and How You Feel , el Dr. Cole explora cómo a menudo pasamos por alto el otro lado de esta relación entre el intestino y el cerebro: el costo de nuestros pensamientos, sentimientos, y las emociones se apoderan de nuestra salud intestinal y, como resultado, las luchas cíclicas de salud que podemos sufrir.
El jugador principal cuando se trata de la salud intestinal es nuestro microbioma intestinal , un ecosistema completo de bacterias y microorganismos que coevolucionaron con los humanos, que es responsable de mantener en funcionamiento muchos de nuestros principales sistemas.
El Dr. Cole explica que sin él, nuestra fisiología no podría completar funciones como convertir hormonas, producir nuestros propios neurotransmisores, operar un sistema inmunológico o digerir alimentos.
También tiene grandes implicaciones para nuestra salud mental. Por ejemplo, alrededor del 95 % de la serotonina (la “hormona de la felicidad”) y el 50 % de la dopamina (la hormona del placer) se producen en el intestino.
“Los estudios actualmente muestran que los niveles más bajos de bacterias beneficiosas impactan [este tipo de] producción de hormonas, y eso influye en el estado de ánimo y el bienestar de las personas”, dice el Dr. Cole.
Aún así, el 75 % del sistema inmunitario también se encuentra en el intestino, y los desequilibrios del microbioma pueden desencadenar una respuesta inflamatoria.
“La inflamación en sí misma no es inherentemente mala”, explica el Dr. Cole, y agrega que, de hecho, la inflamación es un producto del sistema inmunitario diseñado para combatir patógenos, virus y bacterias dañinas.
“El problema es una respuesta inflamatoria crónica en las personas”, dice. “La inflamación es un elemento común entre casi cualquier problema de salud bajo el sol”.
Este vínculo entre los desequilibrios en nuestro microbioma intestinal y la enfermedad está bien establecido, según el European Journal of Clinical Nutrition , asociado con afecciones crónicas que van desde diabetes y enfermedades cardíacas hasta estrés crónico, depresión y enfermedad de parkinson.
Investigaciones recientes, como un estudio de 2021 publicado en la revista médica revisada por pares, Nature Medicine , ha dejado muy claro que nuestra dieta da forma a nuestro microbioma , lo que a su vez afecta nuestro riesgo de enfermedad.
“Es fácil decir, OK, estos alimentos son buenos para el intestino, estos alimentos apoyan niveles saludables de inflamación, estos alimentos pueden aumentar la inflamación ”, dice el Dr. Cole. Pero enfatiza cómo la conexión intestino-cerebro no fluye solo en una dirección. Es bidireccional: el cerebro influye en el intestino y, por cierto, en nuestra salud general, tanto como la salud intestinal es un factor en nuestro bienestar físico y psicológico.
“En Occidente”, dice el Dr. Cole, “a menudo tratamos la salud mental como una especie de cosa separada y abstracta que, de alguna manera, es diferente del resto de nuestra salud. Pero la realidad es que la salud mental es salud física, y nuestro cerebro es una parte de nuestro cuerpo tanto como cualquier otro órgano”.
Es por eso que el bienestar no se trata solo de comer “las cosas correctas”. Como escribe el Dr. Cole en Gut Feelings : “ La verdad es que la comida chatarra inflamatoria de baja calidad no es lo único que sabotea nuestro bienestar.
El Dr. Cole dice que es por eso que muchas personas comienzan a comer más “sano”, pero parece que no pueden alcanzar sus objetivos de salud o sentirse lo mejor posible. “La mayoría no está mirando el poder que ejercen estos sentimientos, cómo perpetúan esa tormenta incendiaria”.
Muchos de nosotros experimentamos factores emocionales que son tan dañinos como cualquier harina refinada o jarabe de maíz con alto contenido de fructosa , como el estrés crónico, la productividad tóxica , el perfeccionismo y los traumas no resueltos.
Como una forma de articular cómo nuestro mundo emocional daña nuestro mundo físico, el Dr. Cole usa el término “inflamación de la vergüenza”, que dice que puede tomar muchas formas. Podrías estar comiendo sin pensar, una comida perfectamente saludable pero estresado en tu escritorio apresurándote para cumplir con una fecha límite; castigarte por tener una porción extra de pizza; o perseguir la dieta y el estilo de vida “perfectos”, como dice el Dr. Cole, la “cultura de la dieta tóxica de hoy en día que se trata de avergonzarse del camino hacia el bienestar”.
Y estos sentimientos no necesariamente tienen que girar en torno a la comida. “ El estrés crónico está íntimamente ligado a la vergüenza”, explica. Por ejemplo, las personas sienten vergüenza por estar demasiado ocupadas y no poder estar presentes con sus seres queridos, se irritan bajo tanto estrés, o experimentan vergüenza por no poder cumplir con estándares inalcanzables, como los establecidos por las redes sociales. Contenido multimedia. “Y además de eso, todos los plazos y horarios y FOMO (miedo a perderse algo), todo esto realmente contribuye a la desregulación del sistema nervioso y el sistema inmunológico, la inflamación crónica”.
Sanar nuestro eje cerebro-intestino se trata de cambiar la perspectiva tanto de nuestros hábitos alimenticios como de nuestro estilo de vida, explica el Dr. Cole.
En su libro el Dr. cole, dice: puedes comer lo que quieras, pero ¿y si comenzamos a usar la comida como meditación tanto como la usamos como medicina?”. Gut Feelings analiza cómo desarrollar un enfoque más consciente de la alimentación , como estar completamente presente cuando se come, sentir más curiosidad por los alimentos que comes y tomarte el tiempo para controlarte a tí mismo, considerando cómo te hacen sentir los diferentes alimentos.
Pero, por otro lado, su enfoque gira en torno a “no volverse maníaco, militante o restrictivo con [tu dieta]”. Por ejemplo, tal vez disfrutes de algunos alimentos no tan saludables, pero esa comida se trataba de pasar tiempo con la familia o los amigos, por lo que valió la pena. “O puedes darte cuenta que una elección de comida que hiciste no valió la pena ”, dice. Y si ese es el caso, ten cuidado de no sentir vergüenza; en cambio, reconoce esta conciencia de la relación de tu cuerpo con los alimentos y permite que crezca, un concepto que el Dr. Cole llama Food Peace.
Y así como nutres tu cuerpo con comida, nutres tu mente con lo que él llama comidas metafísicas. “Al igual que aparecerías para el desayuno, el almuerzo y la cena, agregar pequeñas comidas metafísicas una, dos, tres veces al día para ponerte en conciencia”, dice.
Esta práctica basada en la atención plena es parte de la idea de lo que el Dr. Cole llama “la alegría de perderse algo”, la antítesis de la cultura FOMO actual que estimula la inflamación. “Esto podría ser 10 minutos de trabajo de respiración o meditación”, sugiere, pero no hay una forma correcta de establecer estos límites por ti mismo. Señala la tradición danesa de hygge , encontrando satisfacción acogedora en los placeres simples de la vida como leer un buen libro o preparar una buena taza de té. O está Shinrin-yoku, una filosofía japonesa que se traduce como ” baño en el bosque “, o simplemente pasar tiempo en la naturaleza “Haz lo que resuene en ti que sea accesible, y en donde puedas mantener la coherencia”, dice el Dr. Cole.
Para obtener más información, puedes consultar el libro del Dr. Cole, Gut Feelings , completo con su plan de 21 días para controlar los instintos y los alimentos como recetas de meditación para poner en marcha tu vida libre de vergüenza e inflamación.
Con información de This One Emotion Is Worse for Your Health Than Junk Food, According to a Leading Functional Medicine Doctor
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