El café se ha convertido en la bebida más consumida en todo el mundo; esta popularidad le ha costado llenarse de mitos e interrogantes de todo tipo. Pero, ¿qué es lo que en realidad sucede al beber café con frecuencia?
La cafeína, el ingrediente principal
La cafeína es una sustancia amarga natural que se halla en hojas, semillas o frutos de más de 60 plantas de todo el mundo.
Entre los principales productos que se consumen con cafeína están: los granos de café, las hojas de té, nueces de cola (utilizadas para las bebidas de sabor cola) y el cacao, además de la cafeína sintética que se encuentra en algunos medicamentos como analgésicos o resfrío.
Por sus múltiples propiedades, el café es considerado como un producto que aporta grandes beneficios para el cuerpo humano. Así, el beber café de forma constante y moderada ayuda a:
El café favorece la digestión
La cafeína ayuda al metabolismo a procesar los alimentos más rápido y activa las secreciones digestivas; además, genera un marcado efecto diurético que favorece notablemente la eliminación del ácido láctico, el cual da lugar a la fatiga cuando se almacena en grandes cantidades en el cuerpo.
Tener un buen funcionamiento pulmonar
Debido a su acción sobre los centros nerviosos, aumenta la frecuencia y amplitud de los movimientos respiratorios.
En casos de asma se ha comprobado que contribuye modestamente a su mejoría por su efecto broncodilatador y disminución de fatiga en los músculos respiratorios.
El café disminuye el riesgo de desarrollar diabetes
Específicamente al tipo 2 pues las propiedades antioxidantes de sus granos asisten al metabolismo para procesar mejor los azúcares.
Por otro lado, estimula las células pancreáticas, encargadas de regular la producción de insulina necesaria para el cuerpo.
Reduce la posibilidad de desarrollar síntomas de Alzheimer
Los granos de café poseen un grupo de compuestos conocidos como fenilindanos, producto del proceso de tostado y que, según estudios, mantienen cierta interacción con las proteínas responsables del Alzheimer, auxiliando en la disminución del deterioro cognitivo.
Aminora la depresión
El aroma que expide el café, la energía que produce por sus compuestos y las propiedades antioxidantes naturales de la cafeína son factores que aportan una mejoría para el estado depresivo, actuando como un antiinflamatorio en las partes afectadas del cerebro y que se traduce en el alivio de angustia, característica de este padecimiento.
Bajar la probabilidad de padecer cáncer
Estudios recientes han presentado muestras de que componentes del café actúan como inhibidores del desarrollo del cáncer de próstata: “el acetato de kahweol y el cafestol funcional de forma sinérgica y frenan el desarrollo de las células cancerosas”.
También, las personas que beben entre dos y cuatro tazas de café al día presentan menor riesgo de desarrollar cáncer rectal y de colon al inhibir la secreción de ácidos biliares, que son los precursores de estas enfermedades.
El café ayuda a tener mejor circulación sanguínea
Para el sistema circulatorio, la cafeína es un tónico cardíaco que estimula la aceleración del ritmo del corazón.
De hecho, se ha comprobado que el consumo de café no se relaciona con la rigidez de las arterias, por lo que tampoco es el responsable de las posibilidades de presentar un infarto o un accidente cerebrovascular.
El dato adicional
Si hablamos de la modalidad del café, de acuerdo con diversas pruebas, el café frío multiplica sus beneficios: es más amable con el sistema digestivo, reduciendo la sensación de acidez que en algunos casos se produce, por el contrario, ofrece una sensación interna refrescante.
No menos importante es el hecho de que conserva e intensifica los sabores y aromas originales del café, a diferencia del café caliente que “quema” los matices del sabor de las semillas.
Desde luego, vale la pena tomar muy en cuenta la conocida frase “todo en exceso es malo”, así que todo depende de la cantidad que se consuma, pues en proporciones moderadas el café se considera seguro para la mayoría de las personas.
En este sentido, puedes optar por probar las muchas y diversas opciones de café que hay en el mercado, sin dejarte llevar por los muchos mitos que hay entorno a su consumo.
Ya sea para un día frío o caluroso, el café siempre será una buena opción.
