Llega el día más largo y luminoso del año

El solsticio es el momento del año en que el sol alcanza su mayor o menor altura aparente en el cielo, según el hemisferio, y las duraciones del día o de la noche son las máximas del año.

La culpa del solsticio la tiene el eje de rotación de la Tierra, que está inclinado unos 23.5 grados con respecto al sol. Esto permite que los días no tengan siempre la misma duración, que haya estaciones y que éstas estén invertidas al norte y sur del Ecuador. Si el eje estuviera perpendicular el sol siempre saldría exactamente por el Este y se pondría por el Oeste y las noches y los días durarían siempre lo mismo. Eso ocurre sólo dos días al año, los que denominamos equinoccios.

Te recomendamos: Aumenta la protección solar en piel y ojos

El solsticio ocurrirá a las 11.24 pm del 20 de junio en la Ciudad de México, es el momento en el que el Sol alcanza su más alto grado de declinación norte. Esto marca también el día más largo y luminoso del año en el hemisferio norte y la noche más larga en el sur.

Tradicionalmente el momento en el que el Sol entra a la constelación de Cáncer desde la perspectiva de la Tierra marca el inicio del verano en el norte y del invierno en el sur.

Esta fecha tradicionalmente es considerada el día de máxima energía, el esplendor de la naturaleza. Aún hoy se pueden observar rasgos del solsticio como una fiesta de comunión con la naturaleza en sitios como Stonehenge que están construidos para seguir el curso del Sol.

Te recomendamos: ¿Sabías esto de los girasoles?

La fecha es también una fiesta de la fertilidad en la que se llevan a cabo celebraciones ligadas a la cosecha, a la siembra, tanto en el plano material como espiritual. Los equinoccios y los solsticios son los ejes a través de los cuales se puede sincronizar con los ritmos de la naturaleza, ese fue el sentido que se les dio en las culturas ancestrales.

Los beneficios de vivir cerca y en armonía con la naturaleza han sido documentados extensamente, y se deben fundamentalmente a que el ser humano tiene numerosos ciclos biológicos que están ligados a la luz del sol. De aquí que para conservar o maximizar la energía y eficientar procesos de agricultura sea oportuno ligar los ciclos de sueño y exposición a la luz a los ciclos solares e incluso lunares.