Tarahumaras: cosmovisión de una cultura de atletas
El investigador Luis A. Vargas, analiza factores biológicos, culturales, geográficos y alimenticios que explican las características atléticas tarahumara.
El investigador, Luis Alberto Vargas Guadarrama, del Instituto de Investigaciones Antropológicas (IIA) de la UNAM, estudia y explica las causas por las que el pueblo tarahumara se ha caracterizado por ser una comunidad repleta de atletas por naturaleza.
La idea surgió hace seis años tras el interés de Martha Balcázar Quintero (nutrióloga) y Javier Rivera Morales (antropólogo físico). Este par de alumnos investigadores se dieron a la tarea de estudiar a los tarahumaras más allá del sentido histórico, sino basado en su complejidad filosófica.
“La carrera tiene un componente ideológico y de cosmovisión que aún no se ha esclarecido, pero todo parece indicar —porque no hay fuentes históricas— que está muy relacionada con el Sol, el cual es representado en la bola pateada por los corredores mientras se desplazan, lo cual podría representar el tránsito del astro a través del cielo y relacionarse con situaciones hidrológicas muy profundas”, menciona Vargas.
Es una cosmovisión ligada a los ciclos solares y el agua que inevitablemente se liga con uno de los pilares alimenticios: el maíz, el cual no sólo es considerado como su alimento básico, sino que en la tierra tarahumara crece una variante única, producto de una selección de siglos que ha dado como resultado una planta muy diferente a las otras y que les proporciona los elementos requeridos para la actividad rarámuri.
Existe una bebida de maíz tostado y molido: el pinole, el cual no sólo se puede almacenar por décadas, pues al ser bebido aporta los nutrimentos y energía que se requiere para las carreras largas.
El tener los asentamientos de manera dispersa, es lo que prácticamente ha obligado a esta comunidad a recorrer largas distancias, pues desde pequeños son acostumbrados a este tipo de carreras.
A través del tiempo, los integrantes de los rarámuri o tarahumara, han ido perfeccionando naturalmente su resistencia corporal, algo que ha sorprendido a quienes visitan esta región.
Los rarámuri, atletas por naturaleza
La comunidad tarahumara (rarámuri), son un pueblo originario de México situado en la Sierra Tarahumara, localizada al suroeste del estado de Chihuahua (norte de México).
El significado etimológico de rarámuri es “pie corredor”. Sin embargo, ellos se definen como: “Los de los pies alados”. Y es que hay una característica de este pueblo de “pies alados” que sorprende: son capaces de correr grandes distancias y durante largos periodos, por lo que son considerados lo mejores corredores del planeta.
Los pobladores son capaces de recorrer más de 270 kilómetros sin detenerse y hacer recorridos de cerca de 700 kilómetros; esto equivale a correr 16 maratones seguidos. Los más sorprendente es que corren con sus ropas y calzado tradicional sin ninguna clase de equipamiento.
Ellos mismos confeccionan y la ropa que los cubre es modificada cuando hay bajas temperaturas en la Sierra Tarahumara.
Se ha podido confirmar, que la estructura en el esqueleto de los tarahumaras, ha cambiado en relación a la proporción de las piernas, pero lo más interesante es que desde el punto de vista genético, no existe ningún gen específico que los ayude para desarrollar dichas carreras, su simbiosis es natural, sin alguna alteración química. Todo indica que se trata de metabolismo natural, el aprovechamiento de sustancias y la resistencia al tipo de terreno que les rodea.
Esta es una muestra más de lo que nuestras comunidades indígenas son capaces de hacer. ¿Qué conoces de los pueblos tarahumaras?
FUENTES: UNAMGlobal, Instituto de Investigaciones Antropológicas (IIA)