Salud
La computadora de tu trabajo puede convertirse en un problema de salud
Olvídate del túnel carpiano: el síndrome de visión de computadora está afectando tu productividad, ¡y a tus ojos! Esto es lo que necesitas saber.
Olvídate del túnel carpiano: el síndrome de visión de computadora está afectando tu productividad, ¡y a tus ojos! Esto es lo que necesitas saber.
Olvídate del túnel carpiano: el síndrome de visión de computadora (SVC) está afectando la productividad, ¡y a tus ojos! Esto es lo que necesitas saber para protegerlos.
¿Visión borrosa? ¿Ojos cansados? ¿Cuello tenso? ¿Dolores de cabeza? Si experimentas alguno o todos los síntomas anteriores, puedes tener el síndrome de visión por computadora (SVC). Sí, ¡existe!
Cuando miras las computadoras (o dispositivos como teléfonos inteligentes y tablets) por demasiado tiempo, los músculos de tus ojos tienen que trabajar horas extras. Y “como cualquier músculo, si lo usas constantemente, puede romperse”, dice James Stringham, profesor e investigador de la Universidad de Georgia.
Según el Instituto Estadounidense de Seguridad y Salud Ocupacional, el SVC afecta a alrededor del 90 por ciento de las personas que pasan al menos tres horas frente a su computadora u otros dispositivos de visualización. Y en esta época, la mayoría de los trabajos implican al menos algo de trabajo en la computadora.
¿Qué hacer? Afortunadamente, la investigación muestra que cambiar solo unos pocos hábitos diarios puede reducir el riesgo de fatiga ocular y mejorar la vista en poco tiempo.
Comer vegetales verdes como la espinaca, el kale y el brócoli no es solo recibir tu dosis de vitamina A; también se ha demostrado que disminuye el riesgo de fatiga visual digital.
Un estudio reciente de la Universidad de Georgia descubrió que los nutrientes presentes en vegetales de hojas verdes, llamados luteína y zeaxantina, no solo tienen poderes antioxidantes y antiinflamatorios excepcionales, sino que se encuentran en altas concentraciones en la parte posterior de nuestros ojos, protegiéndolos contra el deslumbramiento y las luces brillantes, incluso de pantallas digitales.
“No consumimos muchos vegetales verdes”, dice el doctor Stringham. Pero los efectos pueden ser enormes. Según el estudio de la Universidad de Georgia, la luteína y la zeaxantina redujeron la fatiga y la fatiga ocular en un 20 por ciento y disminuyeron los dolores de cabeza por semana entre los estudiantes universitarios.
El estudio también encontró que las verduras de hoja verde mejoraron la velocidad del procesamiento visual de los sujetos, lo que condujo a tiempos de reacción más rápidos y a mejores habilidades para la toma de decisiones.
Si bien una solución simple al SVC sería reducir el tiempo que pasamos mirando pantallas digitales, “no es una opción para la mayoría de nosotros cuando nuestros trabajos y nuestra productividad depende de estar frente a una computadora”, dice el doctor Stringham.
En cambio, si tus ojos comienzan a sentirse cansados o tensos mientras miras la pantalla, prueba la “regla 20-20” de la Academia Estadounidense de Optometría: por cada 20 minutos que pases concentrándote en un monitor, tómate un descanso para mirar a lo lejos durante 20 segundos. Hacerlo ayuda a relajar los ojos, reduce la tensión ocular digital y previene los dolores de cabeza.
¿No puedes obtener suficientes hojas verdes en tu dieta diaria para proteger sus ojos? Es comprensible, “Es difícil comer un par de grandes tazones de espinacas todos los días”, dice Stringham. En ese caso, dice, los suplementos son una opción viable.
Stringham recomienda obtener de 20 a 25 mg por día de luteína y zeaxantina en suplementos, que es una proporción difícil de encontrar en la naturaleza, como en los vegetales.
Dejando a un lado tu dieta, cambiar tus hábitos diarios podría ser una solución simple (¡y rápida!) para reducir el riesgo de síndrome de visión de computadora. Stringham recomienda imponer un límite al tiempo recreativo que pasas en la computadora o en cualquier dispositivo con una pantalla. Hacerlo puede protegerte de la longitud de onda llamada “luz azul”, que irrita tus ojos y te hace entrecerrarlos inconscientemente, lo que te causa dolores de cabeza y tensión en el cuello.
Limitar la cantidad de tiempo dedicado a la electrónica es especialmente vital para los adultos mayores de 40 años, cuyos ojos ya comienzan a tensarse debido a la edad. Solo escucha las señales de tu cuerpo, aconseja Stringham; si comienzas a sentir tensión o fatiga en tus ojos, aléjate de los dispositivos electrónicos.
Las gafas de lectura de venta libre no son solo para los viejos y cansados. De hecho, alivian un poco la tensión en tus ojos independientemente de tu edad.
“Más de seis, siete u ocho horas por día frente a una computadora, y más si los estás entrecerrando, puede producir síntomas como tensión, fatiga ocular y dolor de cabeza”, dice Stringham. Los anteojos de lectura pueden bloquear parte de esa luz y enfocar la pantalla de la computadora de forma notable, lo que también reduce la cantidad de esfuerzo que los ojos necesitan hacer.
Vale la pena repetirlo: un arco iris de coloridas verduras en tu plato hace maravillas tanto por tu salud como por tus ojos. Además de las verduras de hoja verde, el maíz y los pimientos naranjas contienen niveles significativos de zeaxantina, un nutriente lleno de vitaminas que reduce la irritación ocular y mejora el rendimiento visual.
Añádelos a tu próxima sopa o ensalada.
Para evitar que la luz azul llegue a tus ojos, quizá sea hora de invertir en unas gafas azules o lentes de contacto con un tinte amarillo que bloqueen la luz azul que proviene de las pantallas digitales. Pero toma en cuenta estos productos también pueden cambiar los colores el monitor de tu computadora.
Tomado de rd.com The Huge Health Issue Affecting Productivity No One’s Talking About
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