¿Se te rompió un diente? ¡Sálvalo con estos pasos!
Un diente roto es una de las urgencias que se ven con mayor frecuencia en clínicas y hospitales. La realidad es que la mayoría de las veces existe solución.
Un diente roto es una de las urgencias que se ven con mayor frecuencia en clínicas y hospitales. Aunque puede ser un momento muy doloroso y una gran preocupación, la realidad es que la mayoría de las veces existe solución.
El primer consejo es guardar la calma y actuar con rapidez para que el especialista se halle con una pieza dental, —o un pedazo de ella— que sea posible colocar nuevamente en su lugar.
Existen dos tipos de rotura dental: parcial y total, y por supuesto ambas tienen sus particularidades. En la parcial se limpia el diente y se realizan acciones para contrarrestar el dolor y la inflamación.
En la total, en cambio, existe dos caminos:
Se enjuaga el diente caído y se intenta colocar en su sitio. Se recomienda morder una gasa o una bolsita de té húmeda para hacer presión sobre la pieza y que se acomode mejor. Hay que tener cuidado de no tragarlo. Los dientes permanentes que se caen por golpe en ocasiones se pueden reimplantar; los llamados dientes de leche no se reimplantan.
Se sumerge el diente en un vaso de leche y se tapona la zona vacía con una gasa para contener la sangre. Una vez controlada la situación, lo más importante será una visita al odontólogo. Si se siguen los pasos adecuados en el menor tiempo posible, el pronóstico será más favorable.
Paso a paso
Si la boca sangra con abundancia hay que enjuagarla para observar las secuelas del golpe o caída
Se debe taponar el hueco con una gasa estéril para contener la sangre
Hay que palpar cada pieza para comprobar si se mueve o que el diente o dientes caídos no están ocultos en la cavidad oral
Localiza el trozo de diente o el diente para proceder a la reconstrucción; si el pedazo no aparece no pasa nada, existen infinidad de formas para reemplazarlo
Cuando se levante el diente del suelo, se lave o se introduzca en algún líquido, es recomendable tomarlo por la corona, jamás por la raíz, la cual no debe ser manipulada
Enjuaga la pieza con abundante agua e introdúcela en leche descremada o suero fisiológico
No es recomendable mantenerla en agua porque desencadena la lisis celular (un tipo de muerte celular). Aunque la saliva tampoco es idónea tanto por las bacterias que contiene como por su pH, si el diente se coloca bajo la lengua o en el vestíbulo bucal, o sea, el espacio lateral entre los labios y la parte interna de las mejillas estará mejor que en seco, pues allí los fibroblastos pueden mantener su vitalidad un par de horas.
En algunos consultorios dentales ofrecen dispositivos de almacenamiento para salvar un diente, los cuales contiene una caja para viajes y una solución. Contempla la posibilidad de comprar una caja para el botiquín casero de primeros auxilios.
Enjuaga la boca con agua tibia salada para la prevención de infecciones
Si el rostro se ha inflamado, coloca un paño frío para reducir la hinchazón
Deben evitarse los alimentos sólidos, así como morder con el diente lastimado
Si el borde del diente roto que se conserva en la boca es filoso, se puede cubrir con cera dental en lo que se visita al médico
Considera la ingesta de un analgésico como el paracetamol para controlar el dolor
Lo que NO se debe hacer
Manipular la raíz del diente
Raspar o tallar la raíz para retirar la suciedad o la sangre
No cepillar ni limpiar el diente con alcohol o peróxido
No permitir que el diente se seque
Fuentes: Medline, biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos y Dentaly.org, plataforma europea digital informativa e independiente.