Este nuevo enfoque busca eliminar la necesidad de agujas tradicionales, haciendo que los procedimientos sean más cómodos y accesibles para todos.
¿Le temes a las inyecciones? Un grupo de científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts ha desarrollado un dispositivo revolucionario que promete transformar la manera en que se administran ciertos tratamientos médicos. Este nuevo enfoque busca eliminar la necesidad de agujas tradicionales, haciendo que los procedimientos sean más cómodos y accesibles para todos.
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El dispositivo, inspirado en la propulsión a chorro de cefalópodos como los calamares, utiliza microchorros de alta precisión para entregar medicamentos directamente en el tracto digestivo. Según un estudio publicado en Nature, este método no solo mejora la absorción de los compuestos, sino que también elimina las incomodidades asociadas con las agujas.
El innovador sistema, denominado MiDe, está diseñado para disparar microchorros de líquido con suficiente fuerza para penetrar los tejidos blandos del sistema gastrointestinal. A diferencia de las jeringas convencionales, este dispositivo no requiere un ángulo específico para ser efectivo, lo que lo hace más versátil para diversas aplicaciones médicas.
El dispositivo MiDe cuenta con cuatro variantes, cada una adaptada a diferentes escenarios clínicos:
Un modelo avanzado incluye una boquilla doble que minimiza el reflujo y garantiza una administración uniforme del medicamento.
Durante las pruebas en animales, como perros y cerdos, los investigadores evaluaron variables como presión, diámetro de las boquillas y ángulos de aplicación. Los resultados confirmaron que el dispositivo es seguro y eficaz, sin causar daños colaterales en los tejidos cercanos.
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Las agujas tradicionales presentan varios problemas, desde la incomodidad hasta el miedo que muchas personas sienten hacia las inyecciones. Según un estudio en PubMed Central, hasta un 71% de las personas experimenta ansiedad o temor ante las inyecciones, lo que puede llevar a evitar tratamientos importantes.
El sistema MiDe busca resolver estos inconvenientes, haciendo que terapias como las de la diabetes o las vacunas sean más accesibles y menos intimidantes. Al eliminar la necesidad de agujas, también se reducen los riesgos de infecciones y accidentes relacionados con su manejo.
Aunque el MiDe todavía está en fase experimental, su potencial para transformar la medicina es inmenso. Desde facilitar la vida de pacientes crónicos hasta mejorar la administración de vacunas en masa, este dispositivo podría marcar el comienzo de una nueva era en la tecnología médica.
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